Robar la intimidad de la esposa
Despu¨¦s de tres a?os, el marido ha sido procesado por revelaci¨®n de secreto con una fianza de 600.000 pesetas
La revelaci¨®n a terceras personas del cuaderno de apuntes o diario de una psicoterapia de pareja de una mujer, por parte de su marido, que utiliz¨® el diario como prueba en una demanda de nulidad matrimonial, origin¨® una querella por violaci¨®n del derecho a la intimidad de la esposa. Despu¨¦s de tres a?os de procedimiento, el juez de instrucci¨®n n¨²mero 1 de Madrid ha apreciado el derecho de la esposa y ha procesado al marido como presunto autor de un delito de descubrimiento y revelaci¨®n de secretos.
El auto de procesamiento, que impone al marido una fianza de 600.000 pesetas para asegurar las responsabilidades pecuniarias que sean procedentes, se?ala: "Entre los meses de febrero y abril de 1979, Jos¨¦ Mar¨ªa Yanguas, que en esas fechas todav¨ªa hac¨ªa vida en com¨²n con su esposa, Cristina Balmaseda, se apoder¨® de su diario, en el que ¨¦sta anotaba aquellos aspectos ¨ªntimos de su vida, que, al parecer, guardaba en un caj¨®n, lo llev¨® al notario de Madrid Jos¨¦ Luis ?lvarez para protocolizarlo y seguidamente divulg¨® su contenido a Joaqu¨ªn Alegret, el cual emiti¨® un dictamen de car¨¢cter m¨¦dico sobre la personalidad ps¨ªquica de Cristina, y a Roberto R?vas".Las penas aplicables por el delito de descubrimiento y revelaci¨®n de secretos son arresto mayor, de un mes y un d¨ªa a seis meses, y multa de 20.000 a 400.000 pesetas.
Versi¨®n de Cristina
Cristina Balmaseda cont¨® a EL PAIS, en la librer¨ªa que regenta junto con su hermana, su versi¨®n de los hechos:
"Mi marido y yo, despu¨¦s de 10 a?os de casados y con tres hijos, decidimos separamos; una separaci¨®n amistosa en la que los dos est¨¢bamos de acuerdo porque el matrimonio iba muy mal. Tras esta decisi¨®n todo fue bien al principio, porque mi marido acord¨® que yo me quedara con la custodia de los ni?os y con el piso. ?l se iba a ir a vivir a un chalet fant¨¢stico de su propiedad, en una urbanizaci¨®n fenomenal, porque tiene mucho dinero; estaba todo clar¨ªsirno".
"Despu¨¦s surgieron una serie de problemas porque ¨¦l empez¨® a incumplir sus compromisos. Dijo que se iba a ir de casa, pero no se iba. Dej¨® de pasarme dinero. Tras estas cuestiones y otras por el estilo solicit¨¦ la separaci¨®n judicial. Entonces Jos¨¦ Mar¨ªa se puso rabios¨ªsimo y empez¨® a tener una actitud terrible, aunque segu¨ªamos viviendo en la misma casa".
"Al pedir la separaci¨®n tienes que seguir conviviendo, porque si te vas pierdes todos los derechos, pierdes a tus hijos".
"Lleg¨® el juicio civil y en ese momento me enter¨¦ de que mi marido, sin saberlo yo, hab¨ªa presentado, entre otras cosas, un cuaderno de apuntes que yo guardaba bajo llave y que utilizaba para anotar los sue?os e incidentes de una terapia de pareja que hab¨ªamos decidido hacer desde hac¨ªa dos a?os para tratar de arreglar la situaci¨®n".
Cuaderno ¨ªntimo
"Este cuaderno, que conten¨ªa todas las anotaciones relativas a la psicoterapia, como los sue?os, las relaciones durante la infancia..., lo hab¨ªa empezado..,por recomendaci¨®n del psic¨®logo, ya que as¨ª puedes comentar los detalles durante las sesiones. ?l tambi¨¦n hab¨ªa escrito uno, aunque no se me ocurri¨® buscarlo, porque si lo busco lo hubiera encontrado".
"Mi marido descerraj¨® el caj¨®n o hizo una llave falsa, cogi¨® el cuaderno, lo fotocopi¨® y lo ense?¨® a sus amigos; lo s¨¦ porque algunos me lo vinieron a contar. Despu¨¦s lo llev¨® a sus abogados y a un notario para presentarlo como prueba contra m¨ª".
"El cuaderno lo llev¨® a un psiquiatra de la Escuela de Medicina Legal, Joaqu¨ªn Alegret, quien hizo un informe que es la cosa m¨¢s injuriosa y m¨¢s calumniosa que te puedes hacer idea. ?Monstruoso! Se dice que estoy loca, paranoica, que no s¨¦ lo que hago, quie no puedo ser una buena madre para mis hijos, y adem¨¢s toda clase de depravaciones y barbaridades. Lo ¨²nico que no se dice de m¨ª es que he atracado un banco".
"Sin embargo el psiquiatra, con el diario en la mano, dice que en el mismo no hay pruebas para todo lo que se narra en el informe, pero que por la grafolog¨ªa se deduce todo lo afirmado".
La moda de la locura
"Yo pens¨¦ que eso era un delito y fui a la Asociaci¨®n de Mujeres Separadas, donde cont¨¦ el caso y ped¨ª consejo. All¨ª me dijeron que el decir que la mujer est¨¢ loca es frecuente, sobre todo en los casos en los que el marido tiene dinero. Sacan un informe psiqui¨¢trico, pagando un buen dinero a un psiquiatra que no ha visto a las mujeres, y lo presentan en los tribunales eclesi¨¢sticos, porque de esa forma conceden la nulidad. La ¨²l tima moda es hacer esto".
"Entonces fue cuando me enter¨¦ de que mi marido hab¨ªa pedido la nulidad. Me lleg¨® un escrito del Tribunal Eclesi¨¢stico n¨²mero cuatro en el que se dec¨ªa que mi mar?do hab¨ªa pedido la nulidad en base a que yo estaba loca".
"Mi marido sigue manteniendo la demanda de nulidad en base a que estoy paranoica, pero el Tribunal no ha resuelto todav¨ªa. De todas formas, yo visit¨¦ a tres psiqui¨¢tras, que me examinaron y me hicieron pruebas y entrevistas. Los doctores Royo Vilanova, forense de los tribunales; Pablo Poblaci¨®n, psiqui¨¢tra, y el Centro turia, de psicolog¨ªa conductista, emitier¨®n tres informes diferentes los que consta que no estoy en absoluto paranoica, sino completamente normal".
"Mi marido llev¨® el informe del psiqui¨¢tra a los juicios civiles que hemos tenido, dos en el juzgado el ¨²ltimo en la Audiencia Territorial de Madrid. En el primer juicio ¨¦l llev¨® el informe y el juez resolvi¨® a mi favor y me dio la custodia de los ni?os, el domicilio conyugal una pensi¨®n de 275.000 pesetas mensuales. Adem¨¢s dijo que el informe del psiqui¨¢tra no era ser? lo que para m¨ª fue una tranqu?lidad".
"Tras el recurso de mi marido otro juez distinto dictamin¨® tambi¨¦n a mi favor, y en el tercer juicio confirmaron la custodia, el domicilio y la pensi¨®n que me hab¨ªa otorgado el primer juez".
"La pensi¨®n nunca me la ha pasado. Estuvo un a?o entero sin pagarme nada y lo pas¨¦ muy mal. Despu¨¦s le embargaron un piso que tiene, y ahora ya me est¨¢n dando algo".
EL PAIS se puso en contacto con Jos¨¦ Mar¨ªa Yanguas para que expusiera su punto de vista, pe ¨¦ste se neg¨® a hacer ning¨²n tipo de declaraciones.
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