El MOPU invertir¨¢ 12.000 millones en los pr¨®ximos cuatro a?os para regenerar y ordenar el litoral espa?ol
El Ministerio de Obras P¨²blicas y Urbanismo (MOPU) invertir¨¢ 12.000 millones de pesetas en los pr¨®ximos cuatro a?os para la regeneraci¨®n y ordenaci¨®n del litoral espa?ol. Para ello se ha comenzado a elaborar una serie de estudios globales que sirvan de base a una pol¨ªtica de prevenci¨®n y conservaci¨®n de las costas. En el programa se emplear¨¢n t¨¦cnicas no experimentadas en Espa?a hasta ahora, como son los diques sumergidos. El presupuesto citado supone multiplicar por cinco los fondos destinados por el anterior Gobierno a este tema. La costa del Maresme, la del delta del Ebro y la de Levante son los puntos de actuaci¨®n prioritaria en esta materia.
El MOPU ha decidido, ante el progresivo deterioro de nuestras costas y ante la necesidad de una normativa actualizada y eficaz, elaborar un conjunto de actuaciones con el objeto de conseguir una ordenaci¨®n y regeneraci¨®n de todo el litoral espa?ol. Como primera fase de esta pol¨ªtica costera puesta en marcha por el MOPU, se han creado diversos programas con el objeto de abordar el problema a medio y largo plazo.Esta nueva pol¨ªtica de costas ha dado jugar a una serie de programas, complementarios entre s¨ª, que son el soporte t¨¦cnico y normativo para esa nueva estrategia. As¨ª, existe un programa para el conocimiento de la situaci¨®n oceanogr¨¢fica, que luego permita el oportuno dise?o de una obra, que es el llamado programa de clima mar¨ªtimo, cuya misi¨®n es hacer operativo un banco de datos oceanogr¨¢fico y desarrollar modelos de previsi¨®n del estado del mar y de propagaci¨®n del oleaje. El Programa de Actuaciones en la Costa tiene por objetivo el dise?o y supervisi¨®n de las obras costeras para la recuperaci¨®n y protecci¨®n de los espacios litorales y la ordenaci¨®n adecuada de las costas y playas.
Los programas normativos desarrollados por el MOPU tienen dos vertientes. Por una parte, los programas de dotaci¨®n de los servicios perif¨¦ricos que aseguran el control adecuado de las intervenciones en la costa y un eficaz cumplimiento de la legislaci¨®n mediante la dotaci¨®n tanto presupuestaria como de personal de las 22 jefaturas de costas que existen. Y por otra, un programa de servicios y actualizaci¨®n de la legislaci¨®n y la elaboraci¨®n de normas complementarias que garanticen la integridad del litoral y la defensa de los intereses p¨²blicos.
Asimismo, existen otros programas de colaboraci¨®n, como son los de limpieza y acondicionamiento de playas, en coordinaci¨®n con otros ¨®rganos administrativos, locales y regionales; y los estudios de impacto ¨¢mbiental, en colaboraci¨®n con la Direcci¨®n General de Medio Ambiente.
Para llevar a cabo este conjunto de programas, el MOPU ha buscado a los t¨¦cnicos espa?oles m¨¢s altamente cualificados, tanto a nivel nacional como internacional. De este modo, se han formado equipos de trabajo con personal procedente del Centro de Estudios y Experimentaci¨®n de Puertos y Costas y con investigadores espa?oles que hab¨ªan ido a trabajar a Holanda y Estados Unidos ante la escasa atenci¨®n que hasta ahora se le hab¨ªa prestado a los problemas costeros.
El proyecto de inversiones que prev¨¦ el MOPU en el cuatrienio 1983-1986 se aproxima a 12.000 millones de pesetas. De esta manera, ser¨¢ posible hacer frente a una larga serie de problemas urgentes, as¨ª como elaborar unos estudios e informes que sirvan de base a las futuras acciones a desarrollar. En el pr¨®ximo a?o, por ejemplo, se iniciar¨¢n del orden de 65 actuaciones significativas, 45 de las cuales corresponden a problemas costeros urgentes y relativamente complejos, fundamentalmente de regeneraci¨®n de playas.
T¨¦cnicas defensivas
Tambi¨¦n se abordar¨¢ la defensa integral de grandes sectores costeros, por constituir una misma unidad fisiogr¨¢fica, preferentemente a base de obras mar¨ªtimas dise?adas para cada tramo en su conjunto. Algunos de estos sectores tienen m¨¢s de 100 kil¨®metros de longitud. Para ello se emplear¨¢n t¨¦cnicas no aplicadas hasta ahora en Espa?a, como es el caso de los diques sumergidos, que se distinguen por reunir simult¨¢neamente una baja agresividad ambiental y una alta efectividad funcional. El golfo de Valencia, entre Benicasin y Denia, el Maresme barcelon¨¦s, entre Arenys del Mar y Casteldefels, el golfo de Huelva, el delta del Ebro y la costa de M¨¢laga, entre el r¨ªo Guadiaro y Marbella, son los sectores principales en donde se aplicar¨¢n estas t¨¦cnicas.Existen otros tramos costeros de menor dimensi¨®n que tambi¨¦n ser¨¢n estudiados con vistas a su defensa integral, utilizando t¨¦cnicas como trasvases de arenas, obras costeras y remodelaci¨®n de cadenas de dunas, t¨¦cnica esta ¨²ltima todav¨ªa en fase de experimentaci¨®n. ?ste es el caso de los estudios a desarrollar en el Maresme norte, en las playas al este de Motril (Granada) y Adra (Almer¨ªa), y de las playas barreras de Foz (Lugo) y El Puntal y Liencres (Santander).
Junto a esto, se realizar¨¢ una serie de actuaciones puntuales que pretenden la recuperaci¨®n, defensa y ampliaci¨®n de playas cuyos problemas actuales pueden ser resueltos dentro de un ¨¢mbito local y se encuentran sometidas a una degradaci¨®n creciente.
Un ejemplo de este ¨²ltimo tipo de acciones es el desarrollado en la playa de Pedregalejo (M¨¢laga), nombre que le viene por el pedregal que se acumulaba en la misma a causa de los temporales, alguno de los cuales, como el de 1977, ocasion¨® destrozos y derribos en la zona costera situada junto a la playa. El costo total de las obras, en el que se incluyen los espigones, la arena, el muro y el paseo, el alumbrado, la jardiner¨ªa y los accesos, ha ascendido a 219 millones de pesetas, de los que 200 fueron aportados por el MOPU y 19 por el Ayuntamiento de M¨¢laga. La ordenaci¨®n de Pedregalejo ha permitido la existencia de 40.000 metros cuadrados de playa, dividida en seis unidades con capacidad para 15.000 personas, as¨ª como la creaci¨®n de 16.000 metros cuadradados de paseo peatonal y 4.000 metros cuadrados de aparcamiento.
Paralelamente a actuaciones que ya se refieren a problemas detectados, se van a llevar a cabo en los pr¨®ximos a?os unos estudios globales por extensos tramos litorales que permitan en un futuro una pol¨ªtica de prevenci¨®n. En el primer a?o, se estudiar¨¢n las zonas del Cant¨¢brico, Galicia, el ¨®valo valenciano, Almer¨ªa y Granada; en el segundo a?o, las de Huelva, Alicante, Murcia y Catalu?a, y en el tercer a?o, Canarias, M¨¢laga, C¨¢diz y el delta del Ebro.
La ordenaci¨®n de la franja litoral se debe contemplar como una planificaci¨®n integral de la Administraci¨®n central, de los entes auton¨®micos, a los cuales se les va a transferir en gran parte la ordenaci¨®n del territorio, y de los propios municipios afectados, cuyas competencias define la ley del Suelo. De este modo, se deber¨¢ conseguir una racional ordenaci¨®n de las playas, con especial atenci¨®n a las concesiones dadas en ellas a particulares de la zona del paseo mar¨ªtimo y los propios accesos a la playa.
"En la sociedad actual", afirm¨® Francisco Rueda, asesor del gabinete t¨¦cnico del MOPU, existen razones fundamentalmente de tipo sociol¨®gico y econ¨®mico que hacen que la gente prefiera residir en zonas costeras. Hoy, uno de cada tres espa?oles vive en poblaciones pr¨®ximas al mar, cuando hace 50 a?os la proporci¨®n era s¨®lo de uno de cada diez. Este hecho de ocupaci¨®n del litoral hace necesario planificarlo cuidadosamente para que se puedan desarrollar en ¨¦l la gran gama de actividades que la sociedad demanda".
"El progresivo deterioro de las costas y playas", explic¨®, "puede deberse a causas naturales, fundamentalmente el oleaje y el transporte de arena, y de modo singularmente importante a Ia acci¨®n humana. De esta forma, obras realizadas de modo arbitrario desencadenan procesos litorales de degradaci¨®n y regresi¨®n de la l¨ªnea de costa. A ello ha contribuido la falta de rigor y las limitaciones y carencias de la normativa vigente, que permit¨ªa una continua vulneraci¨®n de los intereses p¨²blicos"
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