'La miel', de Pedro Mas¨®, un buen efecto
Aunque el acuerdo a¨²n no ha sido firmado, la programaci¨®n cinematogr¨¢fica de Televisi¨®n ha comenzado ya a respetar la nueva cuota de pantalla referida al cine de nuestro pa¨ªs. Unas siete pel¨ªculas espa?olas son emitidas cada mes, y de ah¨ª los recientes ciclos de Paco Mart¨ªnez Soria e Imperio Argentina, adem¨¢s de las pel¨ªculas sueltas que se han intercalado en una programaci¨®n hasta ahora resuelta preferentemente con el material de las multinacionales. (El buen criterio de quienes programan el cine televisivo ha a?adido a este planteamiento una especial atenci¨®n a cinematograf¨ªas poco conocidas como la argentina o la japonesa).La nueva norma puede, sin embargo, acarrear contradicciones importantes, como la de que precisamente sea un Gobierno socialista el que disponga la emisi¨®n de aquellas viejas pel¨ªculas reaccionarias, o poco menos, que componen buena parte de la historia de nuestro cine. ?De d¨®nde elegir m¨¢s de 80 buenas pel¨ªculas espa?olas por a?o? Es probable que no las haya en alg¨²n pa¨ªs pero Espa?a aporta a esa media una caracter¨ªstica moralizante: el cine que se ha hecho entre nosotros respond¨ªa habitualmente a la voluntad de quienes gestaban la vida p¨²blica. ?Y es ahora precisamente cuando se van a divulgar sus planteamientos?
En este sentido plante¨¢bamos hace pocas semanas la barbaridad de que las series que Televisi¨®n produce para s¨ª misma no alberguen preferentemente a los autores que, por sus ideas, no han tenido buenas posibilidades de trabajo; los dem¨¢s ya ser¨¢n divulgados a trav¨¦s de sus pel¨ªculas. Televisi¨®n entendi¨® la cr¨ªtica con torpeza y crey¨® que discut¨ªamos s¨®lo que Pedro Mas¨® fuera uno de los directores elegidos para responsabilizarse de los telefilmes que ahora se preparan. No es ¨¦se el caso, porque el cine de Pedro Mas¨®, guste o no, tiene un particular inter¨¦s: el que nace, parad¨®jicamente, de su inseguridad, de sus contradicciones y, sobre todo, de su capacidad para reflejar en sus pel¨ªculas algunas caracter¨ªsticas ambientales de la Espa?a de cada momento.
En La miel, que se emite esta noche, tenemos un buen efecto. No s¨®lo se refleja en ella la mentalidad de algunos sectores espa?oles respecto a la situaci¨®n democr¨¢tica que en 1978 comenzaba a hacerse firme, sino que propugna, en ¨²ltimo caso, una cierta inmoralidad en las costumbres a pesar del tonillo conservador que se respira a lo largo de toda la comedia. Mas¨® es un hombre inquieto, vivo, que no reflexiona en profundidad las historias que tiene entre manos, pero que ha traspasado en sus pel¨ªculas, como guionista, productor y director, unas referencias sociol¨®gicas que siempre servir¨¢n de estudio; en cualquier caso, son de las pocas que hay en nuestro cine. No son, pues, Mas¨® ni La miel los motivos de la inquietud que despiertan las nuevas normas proteccionistas sobre el cine espa?ol, sino su escasa contrapartida en la producci¨®n propia de la televisi¨®n estatal. La miel, sin ser obra importante, obtuvo un gran ¨¦xito de p¨²blico y tiene, en definitiva, m¨¢s inter¨¦s que la media de las pel¨ªculas espa?olas que ser¨¢ emitida irremisiblemente.
La miel se emite hoy a las 22.30 por la primera cadena.
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