El Gobierno aut¨®nomo rechaza las protestas catalanas contra el centro telef¨®nico de Zaragoza

El presidente del Gobierno aragon¨¦s, Santiago Marraco, ha enviado escritos al presidente de la Compa?¨ªa Telef¨®nica Nacional Espa?ola (CTNE), Luis Solana y al titular de la Generalitat de Catalu?a, Jordi Pujol, mostrando la oposici¨®n aragonesa a una posible modificaci¨®n de la estructura actual de la Telef¨®nica y que afectar¨ªa al centro con sede en Zaragoza.

La Generalitat de Catalu?a y algunas instituciones de aquella comunidad aut¨®noma se han mostrado contrarias a la divisi¨®n territorial de la CTNE por la que Tarragona, L¨¦rida y Gerona dependen de la zona nordeste, cuyo centro est¨¢ ubicado en Zaragoza. Seg¨²n el consejo ejecutivo de la Generalitat, "al margen de las consideraciones estrictamente pol¨ªticas, este hecho puede constituir un grave obst¨¢culo en la estructuraci¨®n de la red de comunicaciones en Catalu?a".Por su parte el diario Avui en un editorial acusaba a Telef¨®nica de ir contra Catalu?a y afirmaba que "Ia dependencia de Zaragoza de esta serie de comunicaciones en gran parte del territorio de Catalu?a tendr¨¢ como consecuencia inmediata que las comunicaciones entre abonados y la compa?¨ªa no podr¨¢n hacerse en catal¨¢n, lo que constituye un atentado contra la lengua catalana".

En su escrito el Gobierno aragon¨¦s manifiesta que la Telef¨®nica es un servicio p¨²blico y que "forzar la estructura territorial para ce?irla a los estrictos l¨ªmites territoriales de las comunidades aut¨®nomas puede ser contradictorio con los objetivos de criterios de rentabilidad y m¨¢xima econom¨ªa para el usuario. El que Zaragoza sea un centro telef¨®nico de este cuadrante peninsular del que dependa el servicio de distintas regiones, no implica merma alguna de los derechos de las distintas comunidades aut¨®nomas".

Por otra parte, el Gobierno aragon¨¦s entiende que "el desarrollo de una red de comunicaciones propias de una comunidad aut¨®noma no debe afectar a una red estatal de telecomunicaciones como la de la CTNE que se basa en los principios de operatividad, econom¨ªa, calidad y prestaci¨®n de un servicio p¨²blico". Por todo ello entiende que la actual situaci¨®n del centro de Zaragoza "no debe modificarse por criterios pol¨ªticos o territoriales" y anuncia que se opondr¨¢ a acciones que no sigan criterios de racionalidad.