Roa Bastos no renuncia a su condici¨®n de paraguayo

El escritor paraguayo Augusto Roa Bastos opina que su nueva nacionalidad espa?ola, que le fue concedida anteayer, "es una acusaci¨®n contra el Gobierno que dirige nuestro pa¨ªs". "Ese Gobierno me ha despejado de todos mis atributos ciudadanos y, por tanto, yo acuso a ese Gobierno de haberme despojado de los signos de mi nacionalidad", afirma Roa Bastos en una entrevista que public¨® ayer el diario independiente Abc Color, de Asunci¨®n.El autor de Yo, el supremo, y de Hijo de hombre, considerado la m¨¢xima figura de las letras paraguayas, reside en Toulouse (Francia), donde es profesor en la universidad, tras ser expulsado de Asunci¨®n en abril de 1982. Roa, que se define como paraguayo militante, dijo que opt¨® por la nacionalidad espa?ola porque con ella no pierde la suya de origen. Desde 1959, entre Paraguay y Espa?a existe convenio de doble nacionalidad. "No renuncio a mi condici¨®n de paraguayo. Esto m¨¢s bien es una nacionalidad honoraria. Yo estaba sin documentaci¨®n, convertido en un ap¨¢trida", explica Roa.

Roa, exiliado desde 1947, regres¨® a su pa¨ªs en marzo del a?o pasado con la intenci¨®n de inscribir como paraguayo a su peque?o hijo, Francisco. Roa est¨¢ casado con la espa?ola Iris Jim¨¦nez. Tras unos d¨ªas en Asunci¨®n, donde dict¨® conferencias y celebr¨® coloquios con estudiantes, el escritor fue expulsado sin que las autoridades comunicaran el motivo.