La confusi¨®n del 'aronismo'

Raymond Aron ha muerto, luego hay que definir el aronismo y buscar all¨ª donde est¨¦n los aronistas. Desde que, hace pocos a?os, el autor de Introducci¨®n a la filosof¨ªa de la historia se convirti¨® en surtidor predilecto de la cultura dominante de la inteligentzia francesa, este hecho se admit¨ªa sin m¨¢s, por decepci¨®n respecto a otras doctrinas, pensamientos o ideolog¨ªas, o por un honesto afecto intelectual hac¨ªa Aron. Pero no ha hecho m¨¢s que morir y se ha producido como una confusi¨®n: no hay acuerdo respecto al aronismo; es decir, no pocos de sus admiradores niegan rotundamente de antemano la existencia de un pensamiento que suceda con fuerza al hombre para afrontar la historia y el futuro.En vida de Aron, para definirlo. filos¨®fica o ideol¨®gicamente, se citaban los nombres del alem¨¢n Weber y del franc¨¦s Tocqueville y se coleg¨ªan las nociones de liberalismo y de nacionalismo para confeccionar la tarjeta de visita del fil¨®sofo-soci¨®logo-moralistaanal¨ªsta-pol¨ªtico que, en la ¨²ltima etapa de su vida, cuando realmente triunf¨® en su pa¨ªs, tambi¨¦n de manera simplista, se defin¨ªa como el anti-Sartre.

Ayer esta cuesti¨®n de la existenc¨ªa del aronismo se encar¨® abiertamente, y seguir¨¢ debati¨¦ndose, sin duda. Un especialista del diario Le Monde disertaba sobre el Aron fil¨®sofo de la historia, enemigo de las ideolog¨ªa". Otro, del mismo diario, negaba el derecho de ciudadan¨ªa al aronismo como doctrina, pero no como actitud intelectual. La misma orientaci¨®n desprend¨ªa un editorial, que anotaba: "Los fil¨®sofos podr¨¢n reprocharle el haberse alejado de la filosofia, y la Universidad, de haberla descuidado. Los s'oci¨®logos y los econconi?stas lo consideran como un aficionado brillante. Los comunistas dicen que ha tratado seriamente el marxismo".

Frente a quienes lo relativizan se alzan los que lo homenajean, que son los m¨¢s numerosos, sin duda, pero que, en gran parte, son los mismos que hace un cuarto de siglo lo insultaban como "fil¨®sofo de la derecha". Uno de los pensadores franceses, heredero de mayo de 1968, Serge July, director del diario Liberation, investigador de lo que hoy pudiera llamarse el liberalismo-libertarismo, excluye el aronismo como corriente de pensamiento, e incluso como adjetivo que envuelva al fil¨®sofo del pensamiento liberal: "Aron'era el mejor profesor de la Universidad francesa". Sin m¨¢s. Defensores no le faltan al aronismo, pero son menos y esperan que el tiempo ajuste las cuentas. La derecha y la izquierda beligerantes en Francia nunca se entendieron con ¨¦l en vida. Lo respetaron y ahora lo contin¨²an respetando, pero sin hacerle regalos.