El caos de Oriente Pr¨®ximo

Oriente Pr¨®ximo, rebelde por naturaleza a la l¨®gica cartesiana, ofrece un espect¨¢culo cada d¨ªa m¨¢s parad¨¦j¨ªco. Tal vez porque se entremezclan dos inspiraciones fundarnentalmente extra?as una de la otra: el c¨¢lculo de las medias y grandes potencias en su fr¨ªa racionalidad y la pulsi¨®n de lo irracional, en la forma de extremismo isl¨¢mico. El resultado es superrealista. Que se juzgue: el presidente de Siria, abogado apasionado e infatigable de la causa palestina, intenta eliniinar a ca?onazos a Arafat de su horizonte pol¨ªtico. ( ... ) En L¨ªbano, un presidente denunciado con frenes¨ª como falangista y parcial por la oposici¨®n, de repente se le inviste, en Ginebra y por sus adversarios, de una misi¨®n que consiste, de hecho, en pedir a Washington que salve la cara ayud¨¢ndole a desviar el acuerdo firmado con Jerusal¨¦n bajo la influencia americana. ( ... ) Siria, que con un estilo sutil ha obtenido satisfacci¨®n en Ginebra, ?in¨ªciar¨¢ la aproximaci¨®n con Estados Unidos y la gran negociaci¨®n que constituye su ¨²nico y constante objetivo?Conociendo el estilo del presidente Asaad, la URSS, que ha transformando a este pa¨ªs en un arsenal, debe tener algunas razones para inquietarse. ( ... )

, 6-7 de noviembre