Una ojeada, a los viajes de Charles Darwin
Estamos todav¨ªa en el regusto del centenario de Darwin, que se celebr¨® el a?o pasado (nacido en 1809, muri¨® en 1882); pero estamos, sobre todo, muy dentro de un mundo ideol¨®gico que comenz¨® a configurarse con ¨¦l. Darwin no s¨®lo hizo un considerable trabajo cient¨ªfico al confirmar, consolidar y aportar pruebas a las teor¨ªas de Lamarck sobre la evoluci¨®n de las especies, sino que su observaci¨®n elabor¨® unos principios filos¨®ficos que otros tratar¨ªan de capitalizar para la v¨ªa pol¨ªtica.Supervivencia
La idea de selecci¨®n natural, la de razas favorecidas por ¨¦l, la lucha por la vida -struggle for life, concepto que ¨¦l acu?¨® y difundi¨® y fue gran frase de la segunda mitad del siglo XIX-, permiti¨® que, junt¨® a la idea de la supervivencia del m¨¢s fuerte, se desarrollaran algunas doctrinas de violencia y agresi¨®n. El nazismo, entre ellas. Un siglo de cr¨ªticas al darwinismo, de aclaraci¨®n de conceptos, de la entrada del azar y las variables en la selecci¨®n y la evoluci¨®n, una idea considerable de que lo que sobrevive no es necesariamente lo mejor en sentido de bien y mal, es decir, dentro de conceptos morales-, est¨¢n actuando hoy sobre las sociedades.
Pero Darwin fue inocente de lo que estaba produciendo, y su aportaci¨®n al mejor conocimiento de nosotros mismos y el mun do que nos rodea es de inmensa magnitud. Incluso sus posibles errores de pensamiento han sido fecundos: han servido como tesis de trabajo para que se desarrolle otro biologismo que, sin ¨¦l, no hubiera sido posible.
No es f¨¢cil predecir c¨®mo va a desarrollar todo esto, el darwinismo y sus escuelas y correcciones, la serie inglesa (BBC) que ha comenzado a darse el s¨¢bado en TVE (primera cadena, 18.30 horas). Est¨¢ basada- en el relato mismo de Charles Darwin, en el Diario de la primera expedici¨®n, en la Autobiograf¨ªa, en los textos de sus cartas. Todo ello novelado. Los ingleses tienen este toque de gracia inimitable para narrar en televisi¨®n, que sin duda deben a una tradici¨®n novel¨ªstica m¨¢s que a la literaria o a la teatral.
La l¨ªgura m¨ªtica del capit¨¢n representante de Dios
El primer cap¨ªtulo mezcla, con escenas alternas, la juventud indecisa de Darwin, destinado a m¨¦dico, luego a te¨®logo, dotado de una considerable repugnancia para los estudios y en cambio decidido a trabajar sobre sus propias observaciones, y la historia anterior del Beagle y su capit¨¢n, Fitzroy; se dedica m¨¢s a Fitzroy y su retrato (que es el hecho por Darwin en sus textos) porque acumula documentaci¨®n sobre la vida a bordo de una unidad de guerra brit¨¢nica en el primer cuarto del siglo XIX, y no sin orgullo: la disciplina, el sentido de la justicia, la figura m¨ªtica del capit¨¢n como pr¨¢ctico representante de Dios -o sea, de su majestad brit¨¢nica- en el trocito del imperio entre las olas.
Hay, naturalmente, mucho de ilusi¨®n optimista en este relato, no confirmado por otros de la ¨¦poca, que revelaban bastante m¨¢s crudeza y menos santidad -o una santidad cruel- en las unidades de guerra. Como la hay -ilusi¨®n y optimismo- en la biograf¨ªa iniciada de Charles Darwin.
Los bi¨®grafos de santos
No parece posible que los bi¨®grafos, sobre todo en cine, y televisi¨®n, sean capaces de adoptar el menor punto de vista cr¨ªtico acerca de sus personajes: se meten dentro de ellos y se adoran a s¨ª mismos. A partir de la cl¨¢sica iniciaci¨®n del h¨¦roe luchando por elaborar su propio destino cuando todo en su entorno pare ce no comprenderles. Debe ser una especie de arrastre intelectual o de tradici¨®n que procede de las vidas de santos, que son las primeras -y durante largo tiempo casi ¨²nicas- biograf¨ªas del pasado literario. As¨ª los bi¨® grafos se convierten en, hagi¨® grafos.
No se puede saber c¨®mo se desarrollar¨¢ y c¨®mo har¨¢ tesis esta biograf¨ªa de Darwin. Por el momento, hay una seguridad a la que atenerse: est¨¢ la novela, est¨¢ la aventura, la descripci¨®n, la calidad de los personajes, la captaci¨®n de la atenci¨®n. Que sirva o no para entender a Darwin es, naturalmente, secundario. Eso habr¨¢ que seguir busc¨¢ndolo en los libros.
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