La direcci¨®n del PCUS expresa su "apoyo total" a la declaraci¨®n de Yuri Andropov

El Bur¨® Pol¨ªtico del Partido Comunista de la Uni¨®n Sovi¨¦tica expres¨® ayer su "aprobaci¨®n y apoyo total" a la declaraci¨®n del secretario general del partido, Yuri Andropov, sobre los euromisiles.Durante su reuni¨®n semanal, el m¨¢ximo ¨®rgano del.partido se?al¨® que el mensaje dirigido el jueves por Andropov es "la expresi¨®n concentrada de la voluntad de todo el partido y de todo el pueblo sovi¨¦tico sobre, su firme determinaci¨®n de rechazar la pol¨ªtica militarista y aventurera de la actual Administraci¨®n norteamericana y del bloque de la OTAN para salvaguardar la seguridad de la URSS y de la comunidad socialista en su conjunto".

Seg¨²n informa F¨¦lix Bay¨®n, en un momento en el que se supone que una grave enfermedad aqueja al l¨ªder sovi¨¦tico y se habla de nuevo de sucesi¨®n en el Kremlin, Mosc¨² ha optado por responder con dureza.a la instalaci¨®n de los euromisiles, como si quisiera dejar bien claro que no piensa alterar su postura al respecto, como no lo hizo en los- cuatro a?os que han transcurrido desde que la OTAN aprob¨® la doble decisi¨®n que dio origen a la siembra de estos nuevos cohetes.

?sta es la lecci¨®n que extraen muchos analistas del comunicado de Yuri Andropov, le¨ªdo el jueves por la noche por un locutor de la televisi¨®n y que ayer reproduc¨ªan en su primera p¨¢gina todos los diarios de la Uni¨®n Sovi¨¦tica.

Andropov era terminante: su pa¨ªs est¨¢ dispuesto a replantear su cu¨¢druple respuesta (retirada de las negociaciones de Ginebra, siembra de m¨¢s SS-20, instalaci¨®n de nuevos cohetes en Checoslovaquia y la Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana y puesta en pr¨¢ctica de sistemas mar-tierra, capaz de alcanzar en pocos minutos el territorio norteamericano) siempre y cuando Occidente vuelva a la posici¨®n inicial.

Mosc¨² parece contar de nuevo con la clave infalible de su pol¨ªtica exterior: el tiempo corre con ritmo distinto fuera que dentro de Rusia. En los cinco a?os que pasar¨¢n antes de que sean operativos todos los euromisiles, algunos pa¨ªses de la OTAN contar¨¢n con nuevos Gobiernos, mientras que es improbable que el sucesor de Andropov tome el tema del desarme desde un punto de vista diferente.

La dureza no excluye la prudencia, y en c¨ªrculos occidentales de Mosc¨² se comenta c¨®mo el comunicado de Andropov confirmaba lo que ya se daba por seguro desde hace varios meses: la URSS no est¨¢ dispuesta a repetir la aventura, de los misiles de Cuba de hace m¨¢s de dos d¨¦cadas y prefiere emplazar sobre sus barcos y submarinos los nuevos sistemas nucleares que le permitan alcanzar el territorio estadounidense en el mismo breve tiempo que los Pershing 2 tardan en traspasar las fronteras de la URSS.

Meses pasados, fuentes centroamericanas de Mosc¨² afirmaron que el propio l¨ªder nicarag¨¹ense Daniel Ortega hab¨ªa ofrecido a Yuri Andropov la posibilidad de que su pa¨ªs sirviera como solar para la instalaci¨®n de nuevos cohetes sovi¨¦ticos de alcance medio que apuntaran contra Estados Unidos.