R¨¦plica del CIS

Cada d¨ªa se publican m¨¢s encuestas y cada d¨ªa es m¨¢s frecuente que cada cual enjuicie su validez y fiabilidad en base a la mayor o menor coincidencia de los datos con sus propias ideas o intereses. Es muy humano, aunque sea poco razonable. Puede llegar a ser inadmisible cuando lleva a poner en entredicho la rectitud y la reputaci¨®n de quienes profesionalmente se dedican a realizar estudios de opini¨®n. Es lo que hace, por ejemplo, el seflor Garc¨ªa L¨®pez Mayordomo en la carta que publicaba en estas p¨¢ginas el 29 de diciembre de 1983, y que merece algunas puntualizaciones.Al firmante de la carta le resulta sospechoso que los sondeos del Centro de Investigaciones Sociol¨®gicas (CIS) confirmen el respaldo de la mayor¨ªa de los espa?oles a los proyectos del Gobierno.

Sus sospechas se acent¨²an al comprobar que, seg¨²n su personal interpretaci¨®n, algunos datos del CIS (EL PAIS, 17-12-1983) no coinciden con otros de Sofemasa (EL PAIS, 27-11-1983) en un punto concreto.

En la de Sofemasa, el 49% de los entrevistados estar¨ªa a favor de que el Estado financiase tanto la ense?anza p¨²blica como la privada. En la del CIS, s¨®lo el 32%. En la primera, s¨®lo el 26% preferir¨ªa que el Estado se limitase a sufragar la ense?anza p¨²blica. En la segunda, esa proporci¨®n se elevar¨ªa al 37%. De modo que, si esa lectura de los datos fuera correcta, resultar¨ªa que los de Sofemasa son claramente m¨¢s favorables que los del CIS a la pol¨ªtica gubernamental que ha inspirado la LODE.

Sucede, sin embargo, que esa lectura no es correcta. La encuesta del CIS ofrec¨ªa tres alternativas posibles: financiaci¨®n exclusiva de la ense?anza p¨²blica (37%); de la p¨²blica y la privada por igual (20%); de toda la ense?anza p¨²blica y de parte de la privada (32%). Con matices, desde luego, esos datos sugieren que el 52%, resultado de la suma de las dos ¨²ltimas opciones, estar¨ªa a favor de la financiaci¨®n por el Estado de ambos tipos de ense?anza, cifra muy similar al 49% de Sofemasa. No hay, pues, discrepancia sustancial entre ambos sondeos.

Hay s¨®lo una diferencia. En el del CIS son m¨¢s que en el de Sofemasa (37%. frente a 26%) los que se oponen a que se financie con fondos p¨²blicos la ense?aza privada. Es decir, son m¨¢s los que se oponen a la l¨ªnea seguida por el Gobierno, y coinciden, por cierto, con el 35% que sosten¨ªa esa misma posici¨®n en otra encuesta del CIS, realizada en junio de 1982, cuando a¨²n gobernaba UCD. / Director del Centro de Investigaciones Sociol¨®gicas.