La resurrecci¨®n del di¨¢logo Este-Oeste marca el fin de la fase ministerial de la Conferencia de Estocolmo

ENVIADO ESPECIAL

La primera semana de la C¨®nferencia sobre Desarme en Europa (CDE) concluy¨® ayer con una ligera pero cierta esperanza de reducci¨®n de la tensi¨®n internacional. Despu¨¦s de los discursos de los 35 ministros de Asuntos Exteriores de la Conferencia de Estocolmo (todos los de Europa menos Albania, Estados Unidos y Canad¨¢), y los numerosos contactos bilaterales mantenidos, se ha resucitado el di¨¢logo Este-Oeste. En la ¨²ltima jornada, el ministro de Asuntos Exteriores del Reino Unido, sir Geoffrey Howe, record¨® que "no ha habido ning¨²n progreso significativo en las negociaciones sobre control de armamentos en los ¨²ltimos cinco a?os", y destac¨® la necesidad de poner fin a la divisi¨®n de Europa, "trabajando en medidas que incrementen la seguridad de todos nosotros".

Howe pidi¨® la reanudaci¨®n de las conversaciones sovi¨¦tico-norteamericanas -de Ginebra, aunque reconoci¨® que "siempre es m¨¢s dif¨ªcil abandonar la mesa negociadora que volver a ella".

Stefan Andrei, ministro de Asuntos Exteriores rumano, calific¨® la situaci¨®n actual como "la m¨¢s grave desde la segunda guerra mundial" y advirti¨® que "las dos conflagraciones mundiales han estallado a partir del territorio europeo". El ministro rumano propuso "la firma de un tratado general europeo de no uso de la fuerza o de la amenaza de la fuerza" y "el establecimiento, a lo largo de las fronteras de los paises miembros de la OTAN y los Estados participantes del Tratado de Varsovia, de un pasillo libre de armas nucleares".

Palabras de esperanza

Desde el pr¨®ximo lunes, la labor negociadora quedar¨¢ en manos de los jefes de delegaci¨®n. Los ministros se han despedido de la capital sueca con palabras de esperanza, justificadas principalmente por el tono moderado empleado en su discurso por el secretario de Estado norteamericano, George Shultz, que inaugur¨® el nuevo lenguaje de la Administraci¨®n de Ronald Reagan, y la flexibilidad que el ministro de Asuntos Exteriores de la Uni¨®n Sovi¨¦tica, Andrei Gromiko, mostr¨® en las conversaciones con sus colegas.La actitud de Gromiko en sus entrevistas bilaterales contrast¨® con la violencia empleada por el jefe de la diplomacia sovi¨¦tica en su alocuci¨®n ante el pleno de la CDE.

Una alta fuente diplom¨¢tica del pa¨ªs anfitri¨®n, llamado a desarrollar un papel importante en esta conferencia, coment¨® ayer que el inicio de la CDE ha demostrado, fundamentalmente, tres cosas. La primera, que Reagan ha decidido presentarse a las elecciones en su pa¨ªs como good boy (buen chico) y para ello habr¨¢ de intentar un acercamiento a la Uni¨®n Sovi¨¦tica. La segunda, que Mosc¨² est¨¢ interesado en reanudar el di¨¢logo con Occidente, sin perder la cara. Y la tercera, que tanto unos como otros han venido a Estocolmo con el prop¨®sito de obtener resultados positivos sobre medidas de confianza.

El ministro de Asuntos Exteriores brit¨¢nico pidi¨® ayer superar "r¨¢pidamente" el primer escal¨®n de la conferencia, es decir, la adopci¨®n de medidas que favorezcan la seguridad y la confianza entre los Estados, ya que "si podemos alcanzar aspectos s¨®lidos sobre este aspecto, podr¨ªamos afrontar la posibilidad de alg¨²n instrumento algo m¨¢s decisivo".

"Si nuestras conversaciones sobre los puntos de nuestra agenda en esta conferencia son exitosas, no hay raz¨®n para que la conferencia no pase a considerar propuestas m¨¢s ambiciosas", a?adi¨®.

Sir Geoffrey Howe propuso que, en una primera fase, se estudien acuerdos para la "observaci¨®n e inspecci¨®n de actividades militares y el intercambio de informaci¨®n, la notificaci¨®n de actividades militares, medidas para evitar la tentaci¨®n al uso de la fuerza o de la amenaza de la fuerza y medidas para reducir el riesgo de un ataque por sorpresa".

El ministro de Asuntos Exteriores de Ruman¨ªa estim¨® que "el despliegue de los nuevos misiles no puede ser aceptado como una fatalidad y que no hay ninguna justificaci¨®n para pasar a la escalada de la carrera de armamentos nucleares.

Sobre esta base", a?adi¨®, "las negociaciones de Ginebra deber¨ªan reanudarse con el objetivo de conseguir un acuerdo que asegure la detenci¨®n del despliegue de misiles nucleares de alcance medio, y la reducci¨®n y la destrucci¨®n de los ya existentes".

La pr¨®xima semana ser¨¢n presentados en la conferencia sendos bloques de propuestas de la Alianza Atl¨¢ntica y del Pacto de Varsovia. Ambos coincidir¨¢n probablemente en algunos aspectos como la notificaci¨®n previa obligatoria de los movimientos militares o el establecimiento de un sistema e informaci¨®n rec¨ªproca y de consultas entre Estados de uno y otro pacto militar. Se da por descontado que estas propuestas ser¨¢n mutuamente rechazadas.

Gestiones franco-espa?olas

Las delegaciones de Espa?a y Francia est¨¢n intentando evitar que las propuestas occidentales sean presentadas como proyecto de la OTAN y sugieren su presentaci¨®n por cada Estado individualmente, procurando adem¨¢s que alg¨²n pa¨ªs neutral, como ser¨ªa el caso de Austria, se adhiera a las mismas.Los pa¨ªses neutrales y no alineados han empezado ya a trabajar para elaborar una simbiosis entre los deseos de uno y otro bloque.