El primer ministro galo fue quien dio la orden de disparar contra los dos barcos

El primer ministro franc¨¦s, Pierre Mauroy, por medio de su consejero militar, fue quien, el mi¨¦rcoles pasado, dio la orden de disparar contra los dos barcos espa?oles que faenaban en el golfo de Vizcaya, seg¨²n informaron a EL PA?S fuentes solventes francesas. Tras la entrevista entre Mauroy y su hom¨®logo espa?ol, Felipe Gonz¨¢lez, ayer en Madrid, en medios oficiales de Par¨ªs se entiende que "el realismo y el di¨¢logo prevalecer¨¢n" entre ambos pa¨ªses.En cosa de horas es muy probable que el detalle sobre el ametrallamiento de los dos pesqueros espa?oles se conozca con toda precisi¨®n en la capital francesa; de momento, ya es posible adelantar que la orden de disparar parti¨® del Hotel Matignon, residencia del primer ministro franc¨¦s.

Este dato, en suma, para la opini¨®n p¨²lica francesa al menos, no hace m¨¢s que resaltar la filosoflia del grave incidente ocurrido el mi¨¦rcoles pasado en aguas comunitarias, a saber: "Si los espa?oles quieren entrar en el Mercado Com¨²n es menester que se enteren, de una vez para siempre, de que en Europa se habla un lenguaje europeo que hay que conocer y practicar", tal como declar¨® ayer oficiosamente un responsable del Gobierno franc¨¦s, y tal como se desprende de la inmensa mayor¨ªa de los comentarios que se emiten en Francia, en la Prensa, en la radio y en la televisi¨®n.

El aspecto humano

El primer secretario del Partido Socialista (PS) franc¨¦s, Lionel Jospin, que el viernes protagoniz¨® una pol¨¦mica con Alfonso Guerra en Luxemburgo, en el transcurso de una reuni¨®n que celebr¨® ayer la direcci¨®n del partido que dirige el Gobierno galo, lament¨® el incidente del golfo de Vizcaya "en su aspecto humano". Esto quiere decir que, para los franceses, todo lo que va m¨¢s all¨¢ de lo "humano", es decir, de las heridas y de la amputaci¨®n de la pierna de uno de los marinos, tiene su origen en la irresponsabilidad de los gobernantes espa?oles.Un comentarista del diario Le Matin se escandaliza de que Francia haya podido disparar contra Espa?a, y evoca la queja de la Prensa espa?ola seg¨²n la cual nunca los franceses habr¨ªan hecho otro tanto, por ejemplo, con barcos alemanes. Pero el mismo comentarista a?ade inmediatamente: "Lo que deben saber los espa?oles es que los alemanes nunca habr¨ªan hecho lo que ellos han hecho".

Si, como hoy han apuntado en Par¨ªs algunos comentaristas pol¨ªticos, las relaciones hispano-francesas se rigen por el realismo y el di¨¢logo, es posible imaginar que todo evolucionar¨¢ de la manera m¨¢s favorable para las dos partes.