Respuesta de Savater

En carta a este diario, el recluso Jos¨¦ Mar¨ªa Villegas, interno en el penal de El Dueso, en Santo?a, puntualiza lo afirmado en mi art¨ªculo Proceso a la tortura diciendo: "No es cierto que no se me permitiera leer Teor¨ªa y pr¨¢ctica de la tortura en Espa?a, pues lo he le¨ªdo, as¨ª como otros de mis compa?eros, etc¨¦tera". Debo aclarar en honor a la verdad -a C¨¦sar lo que es de C¨¦sar, etc¨¦tera- el origen de Jo que quiz¨¢ haya sido solamente un malentendido. Obra en mi poder fotocopia de una orden de la Junta de R¨¦gimen y Administraci¨®n de El Dueso, firmada por el director del penal, fechada el 14 de marzoPasa a la p¨¢gina 12 Viene de la p¨¢gina 11

de 1983, en la que se afirma textualmente: "La Junta acord¨® por unanimidad y por su contenido contrario a las instituciones penitenciarias, de conformidad con lo dispuesto en el art¨ªculo 179 del reglamento, depositar en la escuela del centro, hasta que se produzca su libertad o traslado, el libro propiedad del interno Jos¨¦ Mar¨ªa Villegas Chicoy Teor¨ªa y pr¨¢ctica de la tortura en Espa?a, quedando autorizado para leerlo en la escuela, pero con prohibici¨®n expresa de poder sacarlo de la misma". Esta orden fue entregada por el propio Villegas a su abogado el 8 de marzo de 1984 -es decir, casi un a?o m¨¢s tarde de su redacci¨®n-, acompa?¨¢ndola de una queja verbal por tal prohibici¨®n, en la c¨¢rcel de Ciudad Real, donde se hallaba trasladado con motivo del proceso de Herrera de la Mancha. Me alegra mucho que despu¨¦s las cosas se hayan arreglado satisfactoria mente y el se?or Villegas goce hoy en El Dueso del buen trato que es de desear para todos los reclusos de las c¨¢rceles espa?olas. / Fernando Savater. .