El Rey insiste en su llamamiento a la unidad nacional y al di¨¢logo entre los espa?oles durante su visita a La Rioja

La unidad nacional y la necesidad de di¨¢logo entre todos los espa?oles como v¨ªnculo definitivo y decisorio de nuestra identidad, constituyeron el, lema de los discursos del rey Juan Carlos durante el viaje que por tierras de La Rioja realiz¨® ayer en compa?¨ªa de do?a Sof¨ªa. En Logro?o, capital de la comunidad aut¨®noma riojana, el Rey pronuncio un discurso en el que volvi¨® a recordar los todav¨ªa cercanos pronunciados en su reciente visita a tres provincias de Castilla-Le¨®n.

ENVIADO ESPECIAL,El Rey, que dijo que el di¨¢logo e la sustancia de nuestra historia afirm¨® que ese esp¨ªritu es absolutamente necesario para el mundo de hoy. "Singularmente, los espa?oles", dijo, "estamos necesitados de ¨¦l. Restaurar el di¨¢logo, entregarnos a ¨¦l, convertirlo en instru mento de trabajo pol¨ªtico y civil sin ego¨ªsmos colectivos es una urgente tarea"."No es extra?o", a?adi¨® el Rey, "que aproveche mi estancia entre vosotros para recordar que esta hora espa?ola no tendr¨¢ sus minutos completos, su plenitud de realizaciones, si no aprendemos y nos sacrificamos en el di¨¢logo. Las grarides pol¨ªticas que movilizan a los pueblos descansan y se estimulan , crecen y se hacen perdurables desde el di¨¢logo abierto, generoso, inteligente y realista (...). Entend¨¢monos como espa?oles en un ambiente de paz y de comprensi¨®n. Necesitamos un clima pol¨ªtico limpio y transparente como el cielo que cubre y enciende estos valles y monta?as. Pensemos en las palabras como veh¨ªculos de amor y no como provocaciones y defensas de orgullos insensatos".

M¨¢s adelante, y antes de agradecer la bienvenida de los riojanos, volcados en la plaza del Espol¨®n, el Rey dijo: "Si yo insisto en todas partes en que nadie se encierre en sus intereses organizando particulares batallas sin salida, me corresponde se?alar entre vosotros, reconociendo la serenidad y prudencia de que hac¨¦is gala, la necesidad de una firme voluntad de acuerdo entre todos los espa?oles".

Las llaves del arca

El Rey fue recibido por el presidente de la comunidad aut¨®noma riojana, Jos¨¦ Mar¨ªa de Miguel quien le entreg¨® una de las tres llaves del arca de la democracia, tradici¨®n riojana que se plasmaba en su custodia dentro del arca del te soro comunal. En la actual arca est¨¢n guardadas la Constituci¨®n el Estatuto riojano y un ejemplar de las Glosas emilianenses.

Jos¨¦ Mar¨ªa de Miguel, en su discurso de salutaci¨®n, record¨® los hitos hist¨®ricos de la tierra, cen trados en el santuario de San Mill¨¢n de la Cogolla y en los primeros documentos sobre el castellano y el euskera, nacidos en la ribera del Ebro, vertebrador de La Rioja.

Los Reyes comenzaron su jornada en Calahorra, en donde fueron recibidos por la alcaldesa, la socialista Mar¨ªa Antonia San Felipe. A los primeros actos, tanto en Calahorra como en Logroflo, no asisti¨® el obispo de la di¨®cesis, An tonio ?lvarez, quien se mostr¨® sumamente disgustado con las autoridades riojanas porque s¨®lo hab¨ªa recibido la invitaci¨®n para el al muerzo. Un portavoz de la comunidad aut¨®noma manifest¨® que de la misma manera que en otras ocasiones se le hab¨ªa invitado a actos oficiales se hab¨ªa hecho lo propio esta vez, y prueba de ello es que contaba con la invitaci¨®n para el almuerzo. Los Reyes, tras almorzar en N¨¢jera, en el monasterio de Santa Mar¨ªa de la Real, se dirigieron a Haro. La visita real finaliz¨® en Villoslada de Cameros, en donde fueron cumplimentados por los alcaldes de las villas que componen la mancomunidad.