La historia, hecha vida por Pro M¨²sica
Dentro de la Semana de la Argentina Democr¨¢tica ha actuado, por dos veces, en la sala Cadarso, el Conjunto Pro M¨²sica de Rosario. Ni el lanzamiento ni las caracter¨ªsticas del local elegido tienen nada que ver con la alta categor¨ªa de los int¨¦rpretes, con el repertorio que practican y con el prestigio de que gozan. El grupo que dirige Cristi¨¢n Hern¨¢ndez Largu¨ªa, su fundador en 1962, muy bien merec¨ªa el Teatro Real, la excelente y nov¨ªsima sala del Museo del Prado y, aun siendo inferior por ac¨²stica, capacidad y situaci¨®n, la del Instituto de Cooperaci¨®n Iberoamericana.Pro M¨²sica cultiva el repertorio europeo medieval y renacentista, pero, aparte las excelentes versiones que hace de nuestra m¨²sica pret¨¦rita (desde Encina a Guerrero y Victoria, pasando por los espl¨¦ndidos an¨®nimos de los libros y cancioneros) dedica atenci¨®n a un cap¨ªtulo de extraordinario valor para espa?oles y americanos y. bien poco explotado: la m¨²sica colonial que guardan los archiV'os latinoamericanos sobre los que trabaj¨®, incesantemente, Robert Stevenson, que vino a culminar -en bastante medida- trabajos anteriores como los de Ayestar¨¢n, Curt Lange, Pardo Tovar, Pereira Salas o el importante y prol¨ªfico Carlos Vega. A todo ello suma el repertorio de Pro M¨²sica las transcripciones id¨®neas de una compositora bonaerense, Carmen Garc¨ªa Mu?oz (1929).
Triple imagen de la m¨²sica
Entre los protagonistas de la m¨²sica latinoamericana colonial adquieren importancia singular Juan de Araujo (1646-1712) o Hernando Franco. Franco lleg¨®, procedente de Guatemala, a M¨¦xico, como maestro de capilla de la catedral, hacia 1575. De Puebla y su catedral procede la figura de Gaspar Fern¨¢ndez (1566-1629), nacido en Portugal, autor, como los anteriores incluidos en los programas de Pro M¨²sica. En estas y otras obras de autor an¨®nimo (como las procedentes del C¨®dice de Trujillo) puede advertirse la triple imagen de esta primera m¨²sica americana en su proceso de colonizaci¨®n-resistencia-adaptaci¨®n. Inicialmente sigue, al pie de la letra, los patrones llegados de Europa; despu¨¦s, por iniciativa de los mismos espa?oles, incorpora textos en lenguas ind¨ªgenas, muchas. veces deformados, tal -como luego pasaron a la m¨²sica espa?ola y permanecieron hasta el mism¨ªsimo genero chico; la tercera imagen se basa en el fondo aut¨®ctono o mestizo y anticipa danzas y canciones que har¨¢n luego el viaje de vuelta.
Bien en transcripciones de Stevenson, bien de Carmen Garc¨ªa Mu?oz o de Waldemar Rold¨¢n, Cristi¨¢n Hern¨¢ndez Largu¨ªa, sus colaboradores inmediatos (Susana Imbern, N¨¦stor Mozzoni y Graciella Mozzoni), sus cantores e instrumentistas consiguen no arqueolog¨ªa, no exhibici¨®n de piezas museales, sino interpretaciones ver¨ªdicas y, a la vez, frescas, plenas de vitalidad. El pasado no vuelve nunca, pero en sus expre siones art¨ªsticas puede recrearse, y los componentes de Pro M¨²sica lo hacen a las mil maravillas. A la perfecci¨®n a?aden naturalidad; a, la emoci¨®n, sentido l¨²dico; a la historia, vida. Nuestros m¨¢s encendidos bravos para estos visitantes junto al deseo de un pronto regreso, rodeados de todos los honores que se merecen.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.