Alberto Juantorena
El doble campe¨®n ol¨ªmpico, en gira por Europa, estuvo ayer en Madrid para "gozar del privilegio de competir por Cuba"
Alberto Juantorena lleg¨® ayer a Madrid, procedente de Roma, con dos horas de retraso. Permaneci¨® una hora en el aeropuerto de Barajas, a la espera de solucionar sus problemas de visado, ya que lleg¨® sin ¨¦l. Se fue al hotel, donde nada m¨¢s llegar tom¨® bicarbonato -"tengo el est¨®mago hecho polvo"-, y de all¨ª al estadio para competir en la reuni¨®n del club Mam. El d¨ªa anterior hab¨ªa corrido en Pisa y ma?ana lo har¨¢ en Londres. Lleva 31 d¨ªas fuera de casa, "gozando del privilegio que supone competir por Cuba". Es un defensor a ultranza de la pol¨ªtica de su pa¨ªs y no desperdicia ocasi¨®n alguna para hacer propaganda del r¨¦gimen de Fidel Castro. Pese a ser un superstar del deporte, no estar¨¢ en los Juegos Ol¨ªmpicos, competici¨®n en la que ya ha ganado las medallas de oro de 400 y 800 metros.
Tiene ahora 33 a?os y sigue conservando un f¨ªsico excepcional. Su aspecto s¨®lo ha cambiado en las patillas. Ahora las tiene m¨¢s largas que cuando fue campe¨®n ol¨ªmpico en Montreal (1976) y ganador en sus pruebas de la Copa del Mundo al a?o siguiente, que fue cuando volvi¨® a rebajar el r¨¦cord mundial de 800 metros. Pero sigue gustando tanto a las quincea?eras como antes. Por el hotel estuvieron desfilando estos d¨ªas para ver cu¨¢ndo llegaba.Las lesiones han supuesto varios par¨¦ntesis en la vida deportiva de Juantorena. Ahora vuelve con fuerza a la competici¨®n. Ya ha arreglado todos sus hierros. Y sigue conservando su cartel de primera figura. Lleva un mes fuera de casa, corriendo por Europa. Ayer lo hizo por vez primera en Madrid. Su contrataci¨®n fue barata, en comparaci¨®n con lo que cobran los astros del atletismo: 125.000 pesetas.
"Yo no vivo del atletismo", dice Juantorena, "tengo mi sueldo de licenciado en econ¨®micas; mi mujer es profesora de educaci¨®n f¨ªsica y tengo dos hijos. Formamos una familia como otra cualquiera en La Habana. All¨ª no hay privilegios. Profesional del atletismo es el que cobra cifras astron¨®micas por publicidad o el que est¨¢ metido en determinados equipos. A m¨ª no me interesa eso. Pero por convicci¨®n. Yo quiero ser una persona como otra cualquiera. El ¨²nico privilegio que tengo es competir representado a mi pa¨ªs".
Juantorena no podr¨¢ hacer uso de ese privilegio en los pr¨®ximos Juegos Ol¨ªmpicos de Los ?ngeles. Cuba se sum¨® al boicoteo de la Uni¨®n Sovi¨¦tica, aunque al atleta no le guste la expresi¨®n. "No participaremos porque nuestros aviones no podr¨¢n aterrizar en Estados Unidos y no nos ofrecen ning¨²n tipo de seguridad. Lo que no se puede hacer es que te den jam¨®n y t¨² pongas el pecho. Si nosotros no nos pronunciamos hasta que lo hizo la Uni¨®n Sovi¨¦tica fue porque hoy no puede haber decisiones unilaterales, como tampoco las hay en la Comunidad Europea".
El inter¨¦s pol¨ªtico de Juantorena le llev¨® a leer uno de los libros que se han publicado sobre la muerte de Carrero Blanco. No recuerda el t¨ªtulo. ?l dice que lo vio en una librer¨ªa de La Habana y lo compr¨®, sin m¨¢s. La realidad es que le interesa todo lo que representa la lucha ideol¨®gica. No entiende por qu¨¦, en ocasiones, se dice "?comunista!" como insulto. "Igual pod¨ªamos decir "?capitalista!" o "?imperialista!" para herir. Nosotros no queremos imponer nuestro r¨¦gimen pol¨ªtico. S¨®lo deseamos que nos respeten".
Los mejores amigos de Juantorena son los que comulgan con sus ideas pol¨ªticas. En Espa?a s¨®lo ha encontrado a uno, Fernando Pineda, por su identificaci¨®n con el partido comunista. Con ¨¦l comparti¨® sus horas en Madrid. Juantorena no quiso conocer a nadie m¨¢s, ni siquiera mostr¨® inter¨¦s por saludar al organizador de la reuni¨®n, Miguel Angel Monjas. El atleta lleg¨®, corri¨® y se march¨®. No le aburre su vida n¨®mada. "?C¨®mo me puede cansar competir, si es lo que me gusta! Lo aburrido es entrenar".
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