El jurista Eduardo Garc¨ªa de Enterr¨ªa, premio Pr¨ªncipe de Asturias de Ciencias Sociales

El jurista Eduardo Garc¨ªa de Enterr¨ªa, considerado como uno de los m¨¢s destacados especialistas espa?oles en Derecho Administrativo, fue galardonado ayer con el Premio Pr¨ªncipe de Asturias de Ciencias Sociales. El jurado, presidido por Jos¨¦ Mar¨ªa Aguirre Gozalo, eligi¨® a Garc¨ªa de Enterr¨ªa por s¨®lo dos votos de diferencia con el otro finalista de esta cuarta edici¨®n del premio, el historiador y economista Ram¨®n Carande.

La candidatura de Eduardo Garc¨ªa de Enterr¨ªa, que ya hab¨ªa sido propuesto para el Premio Pr¨ªncipe de Asturias el a?o pasado, fue sugerida verbalmente de nuevo por el miembro del jurado Rodrigo Ur¨ªa Gonz¨¢lez, catedr¨¢tico de Derecho Mercantil. Tras una primera selecci¨®n en la que fueron eliminados, de un total de seis finalistas, los soci¨®logos Gilberto Freire, C¨¢ndido M¨¦ndez y Juan Jos¨¦ Linz, el jurista Carlos Ollero y el escritor Luis Alberto S¨¢nchez, el jurado hizo una ¨²ltima votaci¨®n en la ma?ana de ayer para elegir entre Ram¨®n Carande y Eduardo Garc¨ªa de Enterr¨ªa. La candidatura del premiado consigui¨® siete votos, frente a los cinco favorables al ex catedr¨¢tico de la universidad de Sevilla Ram¨®n Carande. Este a?o se hab¨ªan presentado un total de 48 candidaturas.En el acta de concesi¨®n del premio, el jurado asegura galardonar a Garc¨ªa de Enterr¨ªa "por ser un profesor y jurista de reconocido prestigio en Espa?a y en el extranjero que, sobre la base de un amplio conocimiento del sistema jur¨ªdico continental y del anglosaj¨®n, ha realizado una importante labor investigadora y docente". El jurado estima tambi¨¦n en su valoraci¨®n de Garc¨ªa de Enterr¨ªa que su tarea cient¨ªfica est¨¢ "reflejada en publicaciones muy valiosas y asumida como orientaci¨®n metodol¨®gica por una escuela de disc¨ªpulos y continuadores con marcada influencia en la renovaci¨®n cient¨ªfica del derecho administrativo y en el enfoque de otros sectores del derecho p¨²blico, habiendo sabido conciliar, para ello, el rigor de las formalizaciones te¨®ricas con la dimensi¨®n pr¨¢ctica de los problemas".

La selecci¨®n de los finalistas de esta cuarta edici¨®n del Premio Pr¨ªncipe de Asturias de Ciencias Sociales estaba pr¨¢cticamente decidida a ¨²ltima hora de la noche del jueves. Seis candidatos, de un total de 48, ten¨ªan en ese momento parecidas posibilidades de convertirse en los galardonados de este a?o. Entre esta media docena de escogidos hab¨ªa dos brasile?os (los soci¨®logos C¨¢ndido M¨¦ndez y Gilberto Freire) y un peruano (el escritor Luis Alberto S¨¢nchez). Los otros tres candidatos eran los juristas Carlos Ollero y Eduardo Garc¨ªa de Enterr¨ªa y el historiador y economista Ram¨®n Carande. Eliminados cuatro de ellos tras una serie de votaciones sucesivas, el dilema final del jurado se redujo a elegir entre Eduardo Garc¨ªa de Enterr¨ªa y Ram¨®n Carande. A pesar del hermetismo del jurado, varios de cuyos miembros evitaron comentar cu¨¢l hab¨ªa sido su voto, trascendi¨® que Julio Segura, Enrique Tierno y Joaqu¨ªn Ruiz-Gim¨¦nez apoyaron la candidatura de Ram¨®n Carande.

Jurado

El jurado estuvo compuesto por Manuel Garc¨ªa-Pelayo, presidente del Tribunal Constitucional; Antonio Hern¨¢ndez Gil, presidente del Consejo de Estado; Joaqu¨ªn Ruiz-Gim¨¦nez, defensor del pueblo; Enrique Tierno, alcalde de Madrid; Enrique Fuentes Quintana, economista; Ignacio Herrero Garralda, presidente del Banco Herrero; Juan Rof Carballo, m¨¦dico y ensayista; Luis ?ngel Rojo, catedr¨¢tico de Teor¨ªa Econ¨®mica; Rodrigo Ur¨ªa Gonz¨¢lez, catedr¨¢tico de Derecho Mercantil; Julio Segura, catedr¨¢tico de Teor¨ªa Econ¨®mica; ?lvaro Cuervo Garc¨ªa, catedr¨¢tico de Econom¨ªa de la Empresa. El ex presidente de Banesto Jos¨¦ Mar¨ªa Aguirre Gozalo fue elegido pres¨ªdente del jurado y Jos¨¦ Ignacio Garc¨ªa Lomas actu¨® como secretario.En a?os anteriores, el Premio Pr¨ªncipe de Asturias de Ciencias Sociales fue concedido al economista Rom¨¢n Perpi?¨¢ (1981), al historiador. Antonio Dom¨ªnguez Ortiz (1982) y al antrop¨®logo Julio Caro Baroja (1983). El premio est¨¢ dotado con dos millones de pesetas y una escultura de Joan Mir¨®.

Optimismo ante las autonom¨ªas

La noticia de la concesi¨®n del premio la conoci¨® el profesor Garc¨ªa de Enterr¨ªa en Estrasburgo, justo en un descanso de la sesi¨®n de una vista p¨²blica del Tribunal Europeo de Derechos Humanos al que pertenece en calidad de juez espa?ol. "Me siento completamente emocionado y confuso", manifest¨® a EL PAIS a los pocos minutos de conocer el fallo. "Creo que el jurado ha querido premiar, m¨¢s que a una persona, a un colectivo de juristas que nos ocupamos en el estudio del derecho p¨²blico".Adem¨¢s de la vertiente internacional de su profesi¨®n, que durante algunos d¨ªas le obligar¨¢ a permanecer en Estrasburgo, Eduardo Garc¨ªa de Enterr¨ªa tiene en estos momentos, como ¨¦l mismo confirma, una especial dedicaci¨®n a los temas jur¨ªdicos relacionados con el proceso auton¨®mico espa?ol. Tanto ¨¦l como su equipo se encuentran estudiando los problemas que plantea el proceso de consolidaci¨®n auton¨®mica y publicando trabajos de investigaci¨®n sobre determinados sistemas de federaci¨®n de otros pa¨ªses.

"Tenemos que echar una mano en la medida de nuestras posibilidades, al momento actual espa?ol, momento que se identifica por la opci¨®n auton¨®mica". Al contrario de otras muchas opiniones pesimistas sobre el actual proceso auton¨®mico Eduardo Garc¨ªa de Enterr¨ªa explica que se siente sustancialmente optimista a pesar de las limitaciones y algunos inconvenientes con que cuenta este proceso".

El nuevo premio Pr¨ªncipe de Asturias de Ciencias Sociales defiende el autogobierno "como un medio de acercarse a los problemas reales de cada grupo social" y explica que el sistema auton¨®mico goza de muy buena salud en casi todo el mundo y que lo mismo ocurrir¨¢ en Espa?a en un plazo de tiempo no muy dilatado. Garc¨ªa de Enterr¨ªa fue presidente de la comisi¨®n de expertos que elabor¨®, por encargo del Gobierno de UCD y del PSOE, un informe sobre autonom¨ªas para el Centro de Estudios Constitucionales en mayo de 1981.