Cuerpo al sol

Los ba?os de sol se deben tomar gradualmente, y el tiempo del ba?o se acoplar¨¢ a las posibilidades de cada individuo, dado que la resistencia al sol var¨ªa mucho de unas personas a otras. Como norma general, se aconsejan seis o siete minutos la primera vez, e ir aumentando cuatro minutos cada d¨ªa; no obstante, se podr¨¢ alargar la exposici¨®n al sol cuando la piel se pigmente f¨¢cilmente y no sea muy sensible a los rayos solares.Cuando el cuerpo se ha acostumbrado al sol se puede mantener el ba?o durante horas sin peligro de insolaci¨®n o quemaduras; lo correcto es hacer ejercicio o pasear, el sol molesta menos, se adquiere un bronceado m¨¢s homog¨¦neo y, adem¨¢s, permite a la piel un contacto m¨¢s activo con el aire, oxigen¨¢ndose en profundidad y adquiriendo un aspecto m¨¢s sano.

A veces, ante la a?agaza de un bonito y r¨¢pido bronceado, nos exponemos al sol de forma imprudente, olvidando que el exceso trae siempre consecuencias peligrosas al organismo, como insolaciones, quemaduras, fatiga y cansancio agudos, etc¨¦tera, y en los casos leves, rojeces, picor en la piel, sequedad, etc¨¦tera. Y con el tiempo, provoca un envejecimiento gradual de la epidermis y se pueden formar arrugas prematuras.

Cuando se trata de un enrojecimiento superficial conviene aplicar compresas de t¨¦ fr¨ªo o infusi¨®n de salvia sobre la piel. Si existe un principio de quemadura se debe consultar al m¨¦dico, y como cura de urgencia, proteger la piel con alguna loci¨®n; la de calamina y glicerina es muy eficaz; se prepara con 13 cucharadas de agua, 10 cucharaditas de calamina y tres cucharadas de glicerina. Conviene agitarla en el momento de usarla.

Las cremas y bronceadores protegen la piel del sol siempre que el ba?o no tenga una duraci¨®n exagerada. El aciete de coco y bergamota resulta muy ¨²til; se elabora con ocho cucharadas de aceite de coco, que se ponen en una olla al fuego; una vez caliente se retira y se le a?aden ocho gotas de aceite de bergamota, se mueve la mezcla hasta que se enfr¨ªe y se envasa.