Concluye la huelga general en Bolivia, previa promesa de reforma, econ¨®mica por Siles Zuazo
La poderosa Central Obrera Boliviana (COB), sindicato de orientaci¨®n comunista que agrupa a unos 800.000 afiliados, acord¨® ayer, al t¨¦rmino de una reuni¨®n de su Asamblea Nacional desconvocar la huelga general iniciada el pasado jueves contra la pol¨ªtica econ¨®mica del Gobierno izquierdista del presidente Hern¨¢n Siles Zuazo.La decisi¨®n sindical fue toma da en base a un nuevo acuerdo -calificado de "victoria resonante para los trabajadores" por el miembro del Comit¨¦ Ejecutivo de la COB Filem¨®n Escobar- que compromete al Gobierno en una importante tarea de reforma de la pol¨ªtica de austeridad adoptada para reducir el gasto p¨²blico y poder cumplir con la obligaciones derivadas de la deuda exterior del pa¨ªs, que se valora en 4.500 millones de d¨®lares. Como consecuencia de este acuerdo, y seg¨²n las primeras informaciones que han trascendido sobre su contenido, el Gobierno boliviano suspender¨¢ totalmente el pago de dicha deuda, tanto por lo que se refiere a su amortizaci¨®n como a sus intereses. El pasado 30 de mayo, y a resultas de un primer acuerdo fallido con los sindicatos, el Gobierno de Siles Zuazo suspendi¨® oficialmente, y por un plazo de cuatro a?os, el pago de los intereses correspondientes a la cifra aproximada de unos 1.500 millones de d¨®lares que Bolivia debe a los bancos comerciales extranjeros, cuya amortizaci¨®n hab¨ªa sido interrumpida un mes antes.
Fuentes administrativas informaron, sin embargo, que hasta el 25%, del valor de las exportaciones ser¨ªa asignado al cumplimiento de obligaciones derivadas de deudas contra¨ªdas con institutos internacionales de cr¨¦dito y gobiernos.
El pago de esta deuda exterior, muy gravosa para el pa¨ªs aunque s¨®lo represente una octava porte de la deuda argentina y casi un veinteavo de la deuda de Brasil, ha sido la principal fuente de tensiones entre los sindicatos, y un Gobierno democr¨¢tico que, desde su acceso al poder en junio de 1982, ha tenido que contener tambi¨¦n la presi¨®n constante de unos militares descontentos.
Para hacer frente a la situaci¨®n, Siles decret¨® una devaluaci¨®n frente al d¨®lar de cerca del 400 por ciento y suspendi¨® las subvenciones a alimentos b¨¢sicos, con el resultado d¨¦ que los precios de estos art¨ªculos de primera necesidad experimentaron alzas de hasta el 200%, mientras que los salarios permanec¨ªan congelados. Las protestas sindicales comenzaron de inmediato, en medios de negociaciones frustradas y de divisiones internas que condujeron a la dimisi¨®n, el pasado mes de abril, de Juan Lech¨ªn Oquendo, principal l¨ªder de la COB. Dimisi¨®n que fue ef¨ªmera, porque Lech¨ªn volvi¨® en pocos d¨ªas a su cargo, y denunci¨® que el ruido de sables crec¨ªa, tras retomar sus contactos privilegiados con Siles Zuazo.
El movimiento huelguista se mantuvo, sin embargo, durante abril y mayo, con varias interrupciones, hasta que el secuestro del presidente boliviano, perpetrado por un comando mercenario que actu¨® de cabeza de puente de un proyecto de golpe de Estado, aglutin¨® toda la izquierda en torno a Siles.
La tregua dur¨® horas, porque la COB volvi¨® a la carga el pasado jueves, con una convocatoria de huelga general que ha movilizado, en los ¨²ltimos d¨ªas, a importantes sectores de la banca, la educaci¨®n y funcionarios. El acuerdo alcanzado ayer otorga a los trabajadores una subida salarial del 30% con efectos retroactivos desde abril, abre la v¨ªa para nuevas negociaciones sobre la escala m¨®vil de salarios y establece la congelaci¨®n de algunos precios b¨¢sicos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.