M¨¦xico, frustraci¨®n del cuarteto

M¨¦xico fue la gran decepci¨®n para los hermanos Amat. Por primera vez cuatro hermanos iban a participar en unos juegos ol¨ªmpicos. Eran la gran atracci¨®n, y se publicaron reportajes sobre ellos en diarios de todo el mundo. Su madre no lo ve¨ªa claro: "Si v¨¢is los cuatro, dividiros en dos aviones para no quedarme sola". Hab¨ªa ilusi¨®n, pero Jaume se qued¨® en Espa?a. Los responsables de la empresa en la que trabajaba le prohibieron tajantemente viajar a los Juegos Ol¨ªmpicos, y se lo dijeron con apenas dos semanas de antelaci¨®n. "Jaume se qued¨® destrozado", recuerda Paco. Fue en Munich cuando los Peterson, de Suecia, se convirtieron en los primeros cuatro hermanos en participar en un mismo deporte, el ciclismo.En M¨¦xico, Joan vivi¨® sucesos tristes. Estaba en el interior de un coche, realizando un recorrido tur¨ªstico junto a dos compafleros, cuando se vieron sorprendidos por la matanza de la Plaza de las Tres Culturas. "Nos vimos rodeados por militares disparando y estudiantes quemando coches y huyendo. Muri¨® mucha gente, y nosotros estuvimos 45 minutos largu¨ªsimos en el coche. Creo que la acreditaci¨®n ol¨ªmpica nos salv¨®". En Munich, Joan tambi¨¦n vi¨® el secuestro de los deportistas jud¨ªos por parte de un comando palestino.

Joan, el que ha vivido m¨¢s juegos, se queda con M¨¦xico: "Fueron los m¨¢s alegres. Munich y Montreal eran demasiado fr¨ªos, aunque muy bien organizados, y Mosc¨² fue triste por el pa¨ªs y por el boicoteo".