Los seguidores de Beguin a¨²n conf¨ªan en que hoy se decida a romper su mutismo
ENVIADO ESPECIALNi las muchedumbres gritando su nombre en los m¨ªtines y llam¨¢ndole a¨²n rey ni las llamadas telef¨®nicas de sus herederos pidiendo su Ayuda han decidido hasta ahora a Men¨¢jem Beguin, de 70 a?os de edad, el pol¨ªtico de derechas m¨¢s popular de Israel, a intervenir en la campa?a electoral para intentar salvar de una probable derrota a la coalici¨®n electoral Likud, de la que forma parte el partido Herut (Libertad), que fund¨® en los a?os cuarenta.
Sus partidarios esperaban a¨²n hoy s¨¢bado que el jefe hist¨®rico de la derecha nacionalista israel¨ª rompiese a ¨²ltima hora su mutismo y les brindase su respaldo en una cinta de v¨ªdeo transmitida por televisi¨®n o en una mera grabaci¨®n difundida esta noche en el ¨²ltimo espacio electoral Likud.
"Es la ¨²ltima baza que la derecha puede a¨²n jugar", coment¨® un diplom¨¢tico, mientras el primer ministro, Isaac Shamir, que encabeza la lista de candidatos del Likud al Parlamento, trataba de animar a sus seguidores en el mitin del mi¨¦rcoles, dando a entender que a¨²n "hab¨ªa posibilidades" de que el viejo apareciese en las pantallas.
Hasta ahora el l¨ªder carism¨¢tico de la derecha, que durante la campa?a electoral de 1981 galvaniz¨® a las masas con sus discursos enfervorizados, no ha dado muchas muestras de estar dispuesto a solicitar el voto para el Likud, neg¨¢ndose, por ejemplo, a figurar simb¨®licamente en su elenco de aspirantes a diputados o a recibir a una delegaci¨®n de ni?os de la localidad septentrional de Kiriat Shmona, tra¨ªda a Jerusal¨¦n por militantes de su partido para agradecerle la invasi¨®n de L¨ªbano. El peri¨®dico progubernamental Hatzofeh ha vaticinado, incluso, que se abstendr¨¢ de votar el lunes en los und¨¦cimos comicios generales israel¨ªes.
Todo lo m¨¢s, el viejo l¨ªder expres¨® sus preferencias entregando la m¨®dica cantidad de 25.000 shekeis (13.000 pesetas) para los gastos de la campa?a de su partido, pero ni siquiera lo hizo, como hubiesen querido sus sucesores en el poder, mediante un tal¨®n bancario con su firma, que hubiese podido ser utilizado para fines propagand¨ªsticos.
Recluido en su modesto piso de la calle Tzemah, de Jerusal¨¦n, desde aquel d¨ªa de septiembre en que dijo a sus ministros que "no pod¨ªa seguir adelante", Beguin pasa los d¨ªas vestido con pijama en habitaciones con las persianas echadas, dedic¨¢ndose a dormir y a leer. Uno de los escasos visitantes autorizados a entrar en su domicilio le describ¨ªa ayer en el diario Jerusalem Post como un hombre repentinamente envejecido, p¨¢lido y delgado, y su ex secretaria Yona Klimovitsky asegura que su prolongada depresi¨®n desde su dimisi¨®n en septiembre se debe al fallecimiento de su esposa, Aliza, y a la perfidia de los dirigentes a los que otorg¨® toda su confianza.
?stos son, seg¨²n se deduce de las alusiones de su antigua colaboradora, as¨ª como del c¨¦lebre ex ministro de Defensa, Ariel Sharon, y del ex jefe del Estado Mayor del Ej¨¦rcito, general Rafael Eytan, que lograron convencerle con sus mentiras, en la primavera de 1982, de que invadiera L¨ªbano, asegur¨¢ndole que la duraci¨®n y el coste en vidas israel¨ªes iban a ser m¨ªnimos.
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