Un ex recluso se inculpa ante el juez del asesinato de los marqueses de Urquijo

Eduardo Tagua Sedano, de 45 a?os, delincuente habitual, ratific¨® ayer, ante el juzgado de instrucci¨®n n¨²mero 14, de Madrid, la declaraci¨®n prestada el pasado viernes en el juzgado de guardia, seg¨²n la cual fue ¨¦l y no Rafi Escobedo quien mat¨® a los marqueses de Urquijo. Tagua sali¨® el pasado jueves de la c¨¢rcel de Valencia e inmediatamente se traslad¨® a Madrid para insistir en su pretendida autor¨ªa del asesinato de los marqueses de Urquijo. El ex recluso tiene antecedentes de otras autoimputaciones d¨¦ delitos que despu¨¦s se demostraron falsas.En esta ocasi¨®n Tagua afirm¨® que hab¨ªa sido contratado para el doble asesinato por "una cantidad de clinew que me permitir¨ªa vivir bien durante toda la vida que iba a pasar en la c¨¢rcel". El trato le fue ofrecido por dos hombres "que luego vi en televisi¨®n, en el juicio, y que hablaban mal el espa?ol" - en la puerta de la c¨¢rcel de M¨¢laga, de donde Tagua no quer¨ªa salir, a pesar de haber cumplido su condena. Seg¨²n el relato de Tagua, los dos hombres llegaron y me dijeron que si quer¨ªa, pod¨ªa estar toda la vida en la c¨¢rcel y cobrar una buena cantidad de dinero". Eduardo Tagua se encontraba preso en la c¨¢rcel Modelo de Barcelona en abril pasado cuando envi¨® a Rafael Escobedo, entonces preso en la c¨¢rcel de Carabanchel de Madrid, la fotocopia de una carta que hab¨ªa dirigido al juez declar¨¢ndose culpable del asesinato de los marqueses y proclamando la inocencia de Rafi. Tagua dec¨ªa que hab¨ªa cometido el doble asesinato por encargo de la famila de las v¨ªctimas. El abogado defensor de Rafi distribuy¨® esta carta, que tanto pod¨ªa beneficiar a su defendido ante la opini¨®n p¨²blica, dadas las inc¨®gnitas que hab¨ªan quedado por despejar el juicio oral celebrado contra Escobedo.

Cuando Tagua escribi¨® la carta llevaba apenas cuatro meses en la c¨¢rcel Modelo. Su ficha penitenciaria describ¨ªa una de las personalidades m¨¢s raras de cuantas han pasado por el recinto carcelario: se encontraba a gusto en la c¨¢rcel. En varias ocasiones, cuando le faltaba poco para cumplir una condena, se hab¨ªa declarado autor de delitos que posteriormente se comprobaba que no hab¨ªa cometido. La ficha relataba tambi¨¦n que en alguna ocasi¨®n se hab¨ªa atribuido incluso delitos imaginarios con la ¨²nica finalidad de retrasar su salida de la c¨¢rcel mientras durasen las investigaciones.

Apenas un mes despu¨¦s de escribir la carta atribuy¨¦ndose la muerte de los Urquijo, la Aud¨ªencia de Barcelona sobresey¨® el sumario que se legu¨ªa contra ¨¦l y contra Andr¨¦s Tortijos por la muerte de Juan Barella, asesinado en abril de 1981. El tribunal estim¨® que Tagua no hab¨ªa tenido nada que ver con aquella muerte.