El Porte?o quiere contratos

Desde que se abri¨® de capa en su primer novillo, se vio que El Porte f¨ªo quiere contratos. El venezolano sali¨® esta vez dispuesto a conseguir ese triunfo completo que todav¨ªa no ha conseguido en La Ventas y pudo haberlo alcanzado en el quinto de la tarde, si no es porque pinch¨® tres veces antes de conseguir la estocada. Este fallo con el acero enfri¨® el entusiasmo del p¨²blico, sobre todo el del variopinto conglomerado de extranjeros que abarrota los tendidos de sombra en estos festejos agoste?os y que hab¨ªa jaleado al novillero durante toda su faena, incluso con gritos de ?bravo!, ins¨®litos en un coso taurino.La actuaci¨®n de El Porte?o en este quinto novillo, salvo el fallo a espadas, fue muy redonda en todos los tercios. Muy variado con el capote, que maneja con facilidad y amplio repertorio y m¨¢s seguro en banderillas que en el primero de su lote, en el que hab¨ªa clavado muy desigual y fracasado en el intento de ejecutar un par al cambio. En el quinto estuvo m¨¢s centrado con los palos y con la muleta hizo una faena entonada, con cierta ligaz¨®n y detalles de torero veterano, como cuando dio una r¨¢pida vuelta para aprovechar la querencia del bicho a los tableros y sacar un muletazo que no hab¨ªa podido conseguir citando desde los terrenos de fuera.

En un momento de la actuaci¨®n de El Porte?o, un espectador hizo notar, a voces, la semejanza del novillero con su compatriota Morenito de Maracay. Es posible que tenga un sentido similar de la lidia, pero el de Puerto Cabello parece tener m¨¢s profundidad que el de Maracay en el toreo de muleta.

Sus compa?eros de cartel anduvieron menos acertados en su actuaci¨®n y no supieron sacar partido de las posibilidades que ofrecieron los novillos de Francisco Rubio, que no tuvieron m¨¢s problemas en la muleta que el del insuficiente castigo que se les propin¨® a algunos en varas, como ocurri¨® con el segundo y el sexto. El ¨²ltimo de la tarde era casi un toro y Viard no pudo con ¨¦l. Tampoco se acopl¨® el franc¨¦s con el tercero, al que tore¨® sin aguante, hasta que se le col¨® en un pase con la derecha y decidi¨® acabar con ¨¦l de una estocada baja.

El debutante Juan Carlos Arranz parece estar todav¨ªa un tanto verde. En su primer novillo, flojo y de media arrancada, hizo un toreo fr¨ªo y con precauciones. En el cuarto sac¨® alg¨²n pase con largura, pero no supo encontrar el terreno adecuado para construir la faena. Por no entregarse a la hora de matar, se hart¨® de pinchar a sus enemigos.

La buena colocaci¨®n de Joselito Calder¨®n en banderillas le permiti¨® hacer un oportun¨ªsimo quite a Pep¨ªn Guerrero, que sali¨® perseguido al clavar un par.