Una ligera p¨¦rdida de parada y fonda

Las cuatro gotas vendedoras que cayeron a primeras horas de la ma?ana en el parqu¨¦ se hab¨ªan secado totalmente al t¨¦rmino de la sesi¨®n, m¨¢s o menos como estaba previsto. La temperatura se mantuvo estable, por lo que el ligero descenso de 39 cera¨¦simas en el ¨ªndice general evidencia que no se aproxima borrasca alguna. Los truenos y las tempestades parecen haberse posicionado en la cornisa cant¨¢brica, que para eso est¨¢ bastante acostumbrada a los fuertes temporales.Las realizaciones de beneficios son de peque?a cuant¨ªa y, como es perfectamente l¨®gico en estos casos, se han dirigo a aquellos sectores que vienen registrando ganancias m¨¢s sustanciales. As¨ª, el¨¦ctricas y qu¨ªmicas y textiles son los corros que m¨¢s han visto retroceder sus respectivos ¨ªndices sectoriales.

No obstante, las perspectivas para ambos sectores no son malas. Las pr¨®ximas ampliaciones de capital en el primer caso, y la previsible entrada de capital extranjero en el segundo, permiten esperar un s¨®lido mantenimiento de la tendencia alcista. De todas formas, con unos niveles de plusval¨ªas como los cosechados hasta el momento ser¨¢ inevitable penetrar en un zona marcada por los avances y retrocesos. La inconclusa pelea, si la apuesta tiene que ser clara, debe decantarse con un saldo final favorable a los primeros.

Los bancos, por su parte, registraron una orientaci¨®n ciertamente compradora, que se plasm¨® en un saldo por caja para las mayores entidades de 44.167 t¨ªtulos con signo positivo, resultado al que se lleg¨® gracias a los 41.903 t¨ªtulos a la compra que present¨® el Banco Hispano Americano. La ligera actividad de estas entidades contin¨²a siendo una de las interrogantes m¨¢s frecuenternente planteadas entre los operadores, quienes casi cruzan apuestas sobre el momento en que los bancos van a empezar a caminar con paso m¨¢s firme. Por lo menos, todo el mundo coincide en que ese fausto acontecimiento terminar¨¢ por suceder alg¨²n d¨ªa.

Telef¨®nica, por su lado, prosigue con una pol¨ªtica cautelosa de cambios, sin que su cotizaci¨®n se moviera en la jornada de ayer. La imagen de la nueva compa?¨ªa, que quiere distanci,arse de las alegres e irresponsables subidas, registradas en la segunda mitad de los a?os setenta, as¨ª parece aconsejarlo.

Mientras, los vol¨²menes de contrataci¨®n han alcanzado lo que parece ser un techo (en la sesi¨®n del mi¨¦rcoles se negociaron 1.540,5 millones de pesetas efectivas en acciones) a causa de la falta de papel dispuesto a cambiar de manos, ya que los operadores aseguran que sobra dinero en el mercado.

En estas condiciones es dif¨ªcil que las ¨®rdenes de venta presionen a la baja, ya que el dinero debe estar preparado para absorber lo que le echen. Adem¨¢s, las expectativas sobre la firma del pacto social deben servir de aliciente, a pesar de las dificultades de ¨²ltima hora que siempre surjen en estos compromisos. En todo caso, la firma podr¨ªa realizarse durante el fin de semana.

A excepci¨®n del corro el¨¦ctrico, que puede registraralg¨²n recorte si llega a aparecer una operaci¨®n de venta de considerable volumen, el resto del mercado goza de favorables expectativas y, en l¨ªneas generales, se mantienen el fondo de resistenciay la tendencia alcista.