Para crear empleo
El gran agujero del desarrollo espa?ol -la penuria de servicios colectivos-, el fraude fiscal como importante causante de aqu¨¦l y la secular tendencia a la empresa colectiva inducida "desde arriba" exigen el protagonismo del Estado como impulsor del gran pacto dinamizador de la econom¨ªa y generador de empleo. Ve¨¢moslo. (Las siguientes consideraciones se derivan del "Modelo socio-sist¨¦mico para la generaci¨®n de empleo en Espa?a", concebido principalmente por el profesor F. Parra y coordinado conjuntamente.)Comparando la estructura ocupacional de Espa?a con la de otros pa¨ªses de la OCDE se observa un desfase entre las realizaciones en industrializaci¨®n / desagrarizaci¨®n y las de servicios. Cr¨¦ame el lector y, a cambio, no le atormentar¨¦ con. datos. S¨®lo ¨¦ste: en 1979, el peso del personal de servicios en la poblaci¨®n activa espa?ola es sensiblemente inferior al del italiano, y del total de servicios, s¨®lo el 35% -frente al 44% de Italia y al 55% de Francia- es considerado "social" (educaci¨®n, sanidad, asistencia social, esparcimiento colectivo). Son datos OIT 1980.
Hay muchas razones para afirmar que el *desarrollo espa?ol ha seguido itinerarios m¨¢s duros y salvajes (?capitalismo salvaje?), menos "sociales". El desarrollismo ha comportado: privaci¨®n de libertades, fuerte incremento de las desigualdades regionales, enorme emigraci¨®n, urbanizaci¨®n salvaje,. corrupci¨®n, mayores tasas de suicidio rural que urbano (?algo ¨²nico en Europa", desatenci¨®n de los servicios colectivos. Naturalmente, tal desatenci¨®n tiene que ver con una injusta distribuci¨®n de las cargas fiscales... ?y del fraude!: defraudan m¨¢s los menos (relativamente) gravados.
Reconversi¨®n industrial
Cuando se trata del futuro del empleo, el economic¨ªsmo de turno habla de reconversi¨®n industrial o de las industrias (?no de los servcios!) de futuro. Esto es sensato.
No lo es menos afirmar que ese futuro es de los servicios,, y primordialmente de los servicios sociales ("servicios colectivos", en sentido amplio). Trabajos de prospectiva diversos coinciden en que los empleos de mayor crecimiento ser¨¢n pr¨®ximamente -aparte de los t¨¦cnicos en ordenadores- los relacionados con la salud, la educaci¨®n, el esparcimiento y la asistencia social. Si la necesidad de supervivencia afimentaria (sociedad agraria) y de acumulaci¨®n frente al riesgo (sociedad industrial, capitalista) explican la producci¨®n, ¨¦sta depende cada vez m¨¢s de la necesidad de consumir el mayor n¨²mero de bienes y servicios. As¨ª est¨¢ / est¨¢r¨¢ montada la sociedad a medida que se escalan los pelda?os de la industrializaci¨®n. Si no se quiere sucumbir a la contradicci¨®n, cada vez tiene que ser m¨¢s productivo / rentable consumir educaci¨®n, salud, esparcimiento, seguridad..., calidad de vida. Producit s¨®lo para "crecer" aparece como disfuncional al mismo crecimiento.
El desaf¨ªo consiste en producir producci¨®n: es decir, asegurar el desarrollo "modelando" el crecimiento. En una sociedad que siente la necesidad (valores posindustriales) de la calidad, es cada vez m¨¢s productivo prevenir y curar enfermedades, no aburrirse en el tiempo libre, reducir accidentes, aumentar la partici.paci¨®n, repoblar y cuidar bosques (no s¨®lo para evitar importaci¨®n de madera), limpiar playas y embellecer fachadas de viWeridas y ciudades (con rentabilidad tur¨ªstica inmediata), entretener, asistir... ?y hasta asegurar el orden p¨²blico! Improductivo es no producir todo eso. ?No ser¨¢n Estas las razones de la incontenible ascensi¨®n de los servicios en las sociedades a medida que se industrializan?
Una recaudaci¨®n fiscal injusta
La sociedad espa?ola tiene, m¨¢s que las otras de su entorno, un amplio margen de saturaci¨®n, un enorme agujero. La injusta distribuci¨®n de la recaudaci¨®n fiscal ha impedido, aunque no s¨®lo ella, atender una demanda, que cada vez es m¨¢s rentable y, en consecuencia, menos inflacionar¨ªa; sobre todo, si se trata m¨¢s bien de reasignar recursos ya existentes:
- Los no recaudadas: un bill¨®n de pesetas no recaudado son muchos puestos de trabajo no creados, aun teniendo en cuenta los negativos efectos que la persecuci¨®n del fraude tendr¨ªa en el mismo empleo (el de la econom¨ªa sumergida). La injusticia no crea empleo.
- Los recaudados, pero torpemente asignados: ejemplo, buena parte del subsidio de desempleo no invertido "productivamente" en actividades ya indicadas o en otras (infraestructura viaria, inspecci¨®n t¨¦cnica de veh¨ªculos, explotaci¨®n de estaciones depuradoras, construcci¨®n de miniembalses, recuperaci¨®n de residuos s¨®lidos, conservaci¨®n de la naturaleza) que comporten mayor valor a?adido por trabajo.
Torpemente asignadas pueden ser, por ejemplo, "ayudas familiares" rid¨ªculas que, acumuladas y convenientemente canalizadas, generar¨ªan actividad. En parecida estrategia acumuladora se est¨¢ fomentando en Francia el "autoempleo" de los parados, que aislada o cooperativamente "emprenden" una actividad movilizando subsidios de desempleo recibidos en una sola entrega.
De cara a impulsar la generaci¨®n de empleo se cargan, pues, las tintas en la acci¨®n del sector p¨²blico, aunque s¨®lo sea para reducir su d¨¦ficit: porque reducirlo es recaudar m¨¢s y asignar mejor lo recaudado. Existen m¨¢s razones: m¨¢s que en otras latitudes desarrolladas, "emprender" en Espa?a ha sido movilizaci¨®n colectiva "desde arriba" (la v¨ªa prusiana de la industrializaci¨®n). Quiz¨¢ por eso se echa mano de los grandes pactos, m¨¢s que en otras sociedades m¨¢s "liberales". El de ahora, si lo es, debe dinamizar la sociedad global en busca de riqueza y trabajo creando solidaridades -renuncia a ciertas alzas salariales y rigideces y abaratamiento del cr¨¦dito y reforma de la Seguridad Social y reducci¨®n del fraude y mayor participaci¨®n de los trabajadores y expectativas. Esto mismo, -incluidas las expectativas de los empresarios- es la mejor receta para una pol¨ªtica de empleo, la mayor ventaja del Acuerdo Econ¨®mico y Social.
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