El Plan de Empleo Rural no es una medida de ocupaci¨®n plena

El delegado del Gobierno en Andaluc¨ªa, Leocadio Mar¨ªn, present¨® con optimismo el balance del primer a?o de aplicaci¨®n de las medidas sustitutorias del empleo comunitario. Afirm¨® que ¨¦ste ha sido el a?o m¨¢s tranquilo de la transici¨®n, que el Plan de Empleo Rural (PER) no puede ser una medida pol¨ªtica de pleno empleo, y que hab¨ªa contradicciones entre las jornadas trabajadas y las declaradas, seg¨²n se desprende de una encuesta realizada a instancias del Instituto Nacional de Empleo (INEM). La encuesta realizada en toda Andaluc¨ªa pone de manifiesto que, de todos los beneficiarios del R¨¦gimen Especial Agrario (REA), un 45% tienen una cartilla por familia y un 54%, m¨¢s de una. Otro dato que se desprende del muestreo es el referente a las jornadas trabajadas por a?o, que tuvieron una media en 1983 de 83,9 jornadas, de las que el 70% fue en agricultura. Un 22% de los beneficiarios del REA nunca trabaj¨® en agricultura y un 13% nunca lo hizo en el empleo comunitario.

Sobre la base de esos datos, Leocadio Mar¨ªn dijo que el nuevo sistema trata de "separar la protecci¨®n al desempleo de las medidas generadoras de empleo". Distingui¨® asimismo entre dos colectivos: los trabajadores del campo, que hay temporadas que trabajan y otras que no, y los parados del medio rural, que no tienen por qu¨¦ ser trabajadores del campo. Diversas dificultades administrativas y burocr¨¢ticas han impedido un eficaz saneamiento del censo y en muchos casos los expulsados vuelvan: "de cada 100 expulsados, vuelve el 38%", dijo.