El control de armamentos
Las conversaciones sobre control de armas que se abren en Ginebra pueden se?alar el principio de una importante fase en las relaciones pol¨ªticas entre las superpotencias, pero es poco probable que conduzcan a un r¨¢pido progreso hacia un control de armas propiamente dicho. ( ... )El primer obst¨¢culo para alcanzar un progreso r¨¢pido es que las figuras dirigentes de la Administraci¨®n Reagan est¨¢n profundamente divididas sobre las prioridades relativas a acordar sobre control de armas o rearmamento nacional. Por esta sola y exclusiva raz¨®n, el equipo dirigente de Estados Unidos es poco probable que se encuentre en posici¨®n de ofrecer propuestas sin ambig¨¹edad y bastante plausibles.
El segundo, y obst¨¢culo conexo, es que el presidente Ronald Reagan ha fijado como objetivo el desarrollo de un sistema de misiles defensivos, conocido como Iniciativa de Defensa Estrat¨¦gica (SDI), cuya finalidad expl¨ªcita es eliminar el principio de disuasi¨®n rec¨ªproca, basado en la vulnerabilidad mutua, que ha sido la piedra de toque de todos los acuerdos de control de armamentos desde 1972. Como resultado de ello, el problema central con que se enfrentan los negociadores es si deben volver a los primeros principios, discutiendo los ingredientes esenciales del control de armas, o si la implicaci¨®n doctrinal de la SDI se puede dejar para m¨¢s tarde.
En esta etapa, el programa americano de investigagi¨®n de ex¨®ticas tecnolog¨ªas para la intercepc¨ª¨®n de misiles en el espacio no infringe el conjunto de las negociaciones sobre control de armas. ( ... )
, 7 de enero
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