La inamovilidad de los jueces

La inamovilidad de los jueces y magistrados es uno de los principios que fundamenta -junto a los de independencia, responsabilidad y sometimiento al imperio de la ley- el estatuto jur¨ªdico establecido en la Constituci¨®n espa?ola para los administradores de la justicia. La resoluci¨®n del recurso planteado por el Juez de Vigilancia Penitenciaria de Catalu?a, Antonio Do?ate, y, en su caso, la doctrina que sobre esta materia siente el Tribunal Constitucional -si el recurrente termina pidiendo amparo al alto tribunal-, iluminar¨¢ sobre la fortaleza de uno de los pilares en los que ha de asentarse la credibilidad de los ciudadanos en la justicia.En opini¨®n del recurrente, el acuerdo del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que invoca una disposici¨®n transitoria de un reglamento penitenciario para privarle de parte de las funciones judiciales que desempe?a, viola la garant¨ªa que la Constituci¨®n otorga a los jueces y magistrados, que "no podr¨¢n ser separados, suspendidos, trasladados ni jubilados", dice el art¨ªculo 117.2, "sino por alguna de las causas y con las garant¨ªas previstas en la ley".

La iniciativa del juez Do?ate pone en evidencia, frente a quienes confunden la independencia judicial con el autogobierno, que los riesgos para el ejercicio de la funci¨®n judicial pueden provenir ,no s¨®lo del poder ejecutivo, sino de muy diferentes ¨¢mbitos de poder, entre ellos del propio ¨®rgano de gobierno del poder judicial.