Europa busca la rentabilidad de la investigaci¨®n
Los paises de la CEE consideran que la ciencia y la tecnolog¨ªa son decisivas para el desarrollo econ¨®mico
MALEN RUIZ DE ELVIRA Europa no ha solucionado sus problemas en ciencia y tecnolog¨ªa, e intenta superar los nacionalismos para alcanzar la masa cr¨ªtica necesaria que le permita competir con :Estados Unidos y Jap¨®n, se deduce de lo explicado por los representantes comunitarios. Y esto, a pesar de la conciencia general, en algunos pa¨ªses arraigada desde hace d¨¦cadas, de que la ciencia y la tecnolog¨ªa son decisivas para el desarrollo econ¨®mico.
La preocupaci¨®n que impregna todas las iniciativas comunitarias en el ¨¢rea de la ciencia y la tecnolog¨ªa es evitar duplicidades y conseguir la coordinaci¨®n entre los distintos pa¨ªses. En cuanto a la filosof¨ªa comunitaria, explica Jean Pierre Contzen, director de la poI¨ªtica cient¨ªfica y t¨¦cnica de la Comisi¨®n de la CEE, es pragmatica y dirigida a concentrarse en la realizaci¨®n de los grandes objetivos socioecon¨®micos de la CEE. Es decir, est¨¢ orientada a la innovaci¨®n tecnol¨®gica o ciencia aplicada, y no a la ciencia b¨¢sica, que se deja al cuidado de los Gobiernos nacionales.El enfoque es bastante radical:"Si la innovaci¨®n no se traduce en un producto, no sirve para nada
La CEE, concretamente, intenta situarse en ¨¢reas que no se encuentran cubiertas por otros programas de cooperaci¨®n europeos u organismos internacionales. No interviene, por tanto, en temas espaciales, que lleva la Agencia Espacial Europea; de f¨ªsica de part¨ªculas, a cargo del Centro Europeo de Investigaci¨®n Nuclear (CERN), o programas como el de fabricaci¨®n del avi¨®n Airbus. Sin embargo, s¨ª gestiona directamente el programa de fusi¨®n nuclear, que se plasma en el reactor experirnental JET (Joint European Thorus).
Detr¨¢s de toda esta filosof¨ªa, coinciden los representantes comunitarios, est¨¢ el convencimiento de que la ciencia y la tecnolog¨ªa resultan decisivas en la actualidad para el desarrollo econ¨®mico, y la conciencia del retraso europeo frente a Estados Unidos y Jap¨®n. Como se?al¨® Claudio Boada, presidente de la Asociaci¨®n para el Progreso de la Direcci¨®n (APD), por primera vez desde el siglo XVIII la revoluci¨®n tecnol¨®gica (la actual puede considerarse la tercera o posindustrial) no ha partido de Europa.
Con estos criterios, la CEE ha modificado su enfoque de los programas de investigaci¨®n y desarrollo Q+D), y ha pasado a pedir la participaci¨®n directa de la industria en la confecci¨®n de cada programa de investigaci¨®n, a incluir en cada uno previsiones de formaci¨®n de especialistas y a pedir que participen siempre dos o m¨¢s pa¨ªses. Todas estas caracter¨ªsticas se acompa?an con medidas contextuales, tales como el acceso a bancos de datos, la disminuci¨®n del precio de las materias primas necesarias, etc¨¦tera.
Contzen se?ala que las debilidades europeas en ciencia y tecnolog¨ªa se centran en el envejecimiento del cuerpo de investigadores, la falta de ellos en determinados sectores, mientras muchos licenciados se encuentran en el desempleo (lo que indica un desfase del sistema educativo); la reducci¨®n de medios financieros debido a la crisis econ¨®mica, y la, inadaptaci¨®n de la oferta a la demanda. Entre las debilidades estructurales cita las fronteras, la falta de movilidad del personal cient¨ªfico, las barreras institucionales y por disciplinas dentro de cada pa¨ªs (que producen, entre otras cosas, falta de trasvase entre la industria y la Universidad) y los idiomas.
El ambicioso programa ESPRIT
Los resultados de una encuesta realizada entre 6.000 investigadores, de los que el 95% consideraba muy necesaria la movilidad y la pluridisciplinariedad, han llevado a la dedicaci¨®n de 850 millones de pesetas durante 1984 y 1985 a un plan de estimulaci¨®n de intercambios de investigadores entre laboratorios y empresas.
Uno de los m¨¢s ambiciosos y conocidos de los programas europeos es el ESPRIT (que responde a las siglas en ingl¨¦s de Programa Estrat¨¦gico Europeo para la iInvestigaci¨®n y Desarrollo en Tecnolog¨ªa de la Informaci¨®n). Richard Nobbs, director de relaciones interinstitucionales de la Comisi¨®n de la CEE, pinta un sombr¨ªo panorama de la situaci¨®n actual europea en el campo de la informaci¨®n. Siendo el sector de mayor crecimiento anual en la ¨²ltima d¨¦cada y el que ocupar¨¢ el primer lugar en el a?o 2000, se prev¨¦ que la CEE tenga un d¨¦ficit en este sector en 1990 de 15.6 millones de d¨®lares, frente a un super¨¢vit de Jap¨®n de 42 millones de d¨®lares, y de Estados Unidos, de 19,9 millones de d¨®lares.
Para Nobbs, el tema es sencillo de explicar con un ejemplo, "En centralitas digitales, la situaci¨®n idela para el mercado existente ser¨ªa que Europa tuviera dos empresas en este sector; en la realidad existen 23 que compiten entre s¨ª".
El programa, aparte de los aspectos m¨¢s comerciales, se centra en la investigaci¨®n y desarrollo como medio de lograr que en un plazo de de cinco a 10 a?os la industria europea sea competitiva en tecnolog¨ªas de la informaci¨®n. Los cinco sectores en los que pretende incidir son la inicroelectr¨®nica avanzada, la tecnolog¨ªa de programaci¨®n o sofware, la ofim¨¢tica (aplicaci¨®n de estas tecnolog¨ªas a las oficinas), la fabricaci¨®n integrada por ordenador, y el desarrollo de tecnolog¨ªas avanzadas de informaci¨®n, como es la integraci¨®n de redes inform¨¢ticas y de telecomunicaciones
En 1984 se han aprobado 106 proyectos de, investigaci¨®n, en un 75% de los cu¨¢les participa la Universidad, en un 50% la peque?a y mediana empresa y en un 70% las grandes empresas, que representan 6.000 a?os hombre. Se exige que en los proyectos participen al menos dos socios industriales independientes de dos pa¨ªses de la CEE.
Para Michel Carpentier, director general de Tecnolog¨ªas de la Informaci¨®n y las Telecomunicaciones de la CEE, Europa se juega en el programa ESPRIT, a corto plazo, cuatro millones de empleos.
Investigaci¨®n industrial y biotecnolog¨ªa
Varios de los programas de la CEE en ciencia y tecnolog¨ªa son de muy reciente aprobaci¨®n. Es el caso del programa BRITE, de incorporaci¨®n de tecnolog¨ªas avaniadas en sectores tradicionales. Hendrik Tent, su director, explica que en ¨¦l se han fijado varios campos de especial inter¨¦s entre los que se encuentra la fiabilidad, el l¨¢ser, el dise?o y fabricaci¨®n por ordenador (CAD / CAM), la tecnolog¨ªa de membranas, la cat¨¢lisis, los pol¨ªmeros y la rob¨®tica. Se pretende que ejerza una funci¨®n catalizadora, y se van a dedicar 250 mullones de ECU (unidad de cuenta europea, equivalente a 120 pesetas) en cuatro a?os. La CEE participa conel 50% en cada proyecto
En el caso de un nuevo importante plan de fomento de la biotecnolog¨ªa, la aprobaci¨®n se va a realizar la pr¨®xima semana. Se pretende romper el monopolio estadounidens, cuyo ¨²nico competidor podr¨ªa ser Jap¨®n, teniendo en cuenta que el 40% de los productos de los pa¨ªses industrializados tiene origen biol¨®gico. Los campos escogidos para su fomento son la ingenier¨ªa enzim¨¢tica y gen¨¦tica, la fisiolog¨ªa y estudio gen¨¦tico de especies interesantes, la tecnolog¨ªa aplicable al cultivo in vitro de c¨¦lulas y tejidos y, en general, la aplicaci¨®n de estas nuevas t¨¦cnicas a la agricultura y la agroalimentaci¨®n.
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