El arte singular de la escolan¨ªa de Montserrat

La escolan¨ªa de Montserrat lleg¨® a Madrid con sus casi siete siglos de historia a las espaldas y actu¨®, el pasado 16 de marzo, en el teatro Real.En un s¨¢bado por la noche y en pleno puente de San Jos¨¦, la magia montserratina consigui¨® una entrada que se acerc¨® al lleno. Bajo la direcci¨®n de Ireneu Segarra, un m¨²sico completo e inquieto cuya modernidad qued¨® patente en su excelente Salve, Regina, la escolan¨ªa cant¨® m¨²sica de nuestros polifonistas del siglo XVI -Morales, Escobar, Victoria-, ejemplos de la escuela montserratina de los siglos XVII y XVIII -el magn¨ªfico Cererols, Miguel L¨®pez, Benet Juli¨¢, Narc¨ªs Casanovas y Anselm Viola- y, en fin, cuatro p¨¢ginas contempor¨¢neas de Cassi¨¢ Just, el actual abad; Francis Poulen?, en sus transidas Letan¨ªas a la Virgen Negra; Britten, en la sumaria Misa breve, y la aludida Salve de Segarra. Colabor¨® con total acierto el organista Joan Casals.

Dominando el dif¨ªcil universo de las voces infantiles, Segarra sabe unificarlas hasta lograr cohesi¨®n y buen empaste, bondad de formas y estilos y una expresividad peculiar que no se parece a ninguna otra. Los escolanos se alejan del amanerado figurativismo de tantos otros coros infantiles, sin excluir los justamente c¨¦lebres Ni?os de Viena. Hay en su arte exacta definici¨®n y profundidad.