La noche del brindis con cava en vasos de pl¨¢stico
Unas l¨¢grimas traicionaron a Lorenzo Natali, vicepresidente de la Comisi¨®n Europea y corredor de fondo de esta larga negociaci¨®n, ante los aplausos cerrados de que fue objeto, tras las felicitaciones que le trasmiti¨® Fernando Mor¨¢n, en la sesi¨®n formal de negociaci¨®n, al filo de las tres de la madrugada. Despu¨¦s corri¨® el cava -y no el champa?a- para la celebraci¨®n.Catorce pisos m¨¢s abajo esperaban los periodistas. En fila, como los triunfadores de una importante batalla de la antig¨¹edad, entraron en la sala de conferencias Giulio Andreotti, Jacques Delors, Frans Andriessen, Ernani Lopes y Fernando Mor¨¢n. Fue entonces, cuando al son del "Asturias patria querida" que los periodistas espa?oles entonamos, empez¨® el verdadero triunfo.
No fue realmente una conferencia de prensa, sino una serie de declaraciones fraternales. Los rencores del pasado quedaban milagrosamente enterrados. Mor¨¢n dec¨ªa olvidar las rencillas que hab¨ªa tenido con Natali. Pero todos estaban cansados y, quiz¨¢s por ello, la celebraci¨®n duro poco. Esta vez, desgraciadamente, en vasos de pl¨¢stico, una forma poco elegante para un d¨ªa hist¨®rico.
Mor¨¢n felicit¨® a un Andreotti que hab¨ªa dado pruebas de lo que, es "la sabidur¨ªa romana y la paciencia franciscana", nada mejor para un democristiano. En la CEE, parece una norma que los grandes acuerdos s¨®lo llegan de madrugada. De otro modo parecer¨ªa que se ha cedido demasiado.
Y el propio Mor¨¢n cont¨® un chiste de Mor¨¢n: llamo al presidente del Gobierno tras el acuerdo y le pregunto por qu¨¦ sonaba m¨²sica funebre en la radio espa?ola. "No me vengas con humor negro" le contest¨® Felipe Gonz¨¢lez.
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