Va de Oscar
La intervenci¨®n del diputado ?scar Alzaga asegurando que la agencia Efe est¨¢ al margen de la ley no tiene, seg¨²n el autor de este art¨ªculo, ning¨²n fundamento. En sus palabras se han falseado datos sobre la importancia de la agencia en Latinoam¨¦rica, se han omitido frases del informe del International Press Institute elogiosas para la agencia y se ha inventado una auditor¨ªa que nunca existi¨®, afirma el articuli.sta.Que don ?scar Alzaga pretenda que la agencia Efe se encuentre al margen de la ley, y nada menos que de la ley de leyes, es asunto suyo. Depende de la interpretaci¨®n que quiera dar al art¨ªculo 20 de nuestra Constituci¨®n.
Pero lo que ya no es s¨®lo asunto suyo, sino de todos, y en particular de quienes trabajamos en y para Efe a cualquier nivel, es que apoye su argumentaci¨®n contra el actual funcionamiento de la agencia en datos que son, lisa y llanamente, falsos. Pera quien se arroga el hablar en nombre del pueblo espa?ol -dato tambi¨¦n falso, pues ¨²nicamente puede hablar en nombre de una parte del pueblo espa?ol-, su reciente intervenci¨®n en las Cortes constituye as¨ª un menosprecio para sus representados, para nuestro Parlamento y, en definitiva, para nuestra democracia. En semejante tribuna no se deber¨ªa hablar por boca de ganso ni de gans¨®n.
Porque por tales bocas se corre el peligro de hacer afirmaciones tan peregrinas como que Efe ha perdido el primer lugar en Hispanoam¨¦rica, que se ocultan los resultados de la auditor¨ªa de 1983, que un ya famoso convenio con UPI es desconocido hasta por el Consejo de Efe y que los medios de informaci¨®n privados deben tener acceso a la agencia. Ni Efe ha sido nunca la primera en Hispanoam¨¦rica, ni existi¨® jam¨¢s una auditor¨ªa de 1983, ni se ocult¨® en ning¨²n momento el acuerdo con UPI, ni ha tratado nadie de impedir el acceso de los medios privados a la agencia Efe..., por la sencilla raz¨®n de que m¨¢s de 100 de ellos, desde Abc hasta La Editorial Cat¨®lica, desde la SER hasta EL PAIS, son accionistas de esta sociedad an¨®nima. As¨ª de bochornosa es la realidad, don ?scar, para quien afirmaciones tan poco fundamentadas hizo en nombre del pueblo espa?ol.
Y creer¨ªa yo que ah¨ª se paraba el carro, en la indocumentaci¨®n y rigor nulo, si no hubiera sido por otro dato muy revelador: su referencia a un informe del IPI (International Press Institute), al que cit¨® como fuente de la mayor solvencia para poner cual chupa de d¨®mine al Gobierno por su pretendida manipulaci¨®n de los medios informativos p¨²blicos. ?Pero, don ?scar ... ! En ese mismo p¨¢rrafo que usted cit¨® se dec¨ªa, inmediatamente despu¨¦s, por la misma fuente de gran solvencia, que "s¨®lo la agencia estatal de noticias (Efe) ha hecho progresos hacia una mayor independencia y profesionalizaci¨®n bajo su presidente, Ricardo Utrilla".
Claro, que hay quien s¨®lo se entera de las cosas seg¨²n el peri¨®dico que lee (esa omitida frase fue publicada en su d¨ªa por EL PAIS, aunque no, por ejemplo, en Abc, pese a su extensa rese?a del informe del IPI desde Londres), pero a un elegido del pueblo cabr¨ªa reclamarle m¨¢s lecturas, mejor documentaci¨®n y menos cirug¨ªa de textos.
Y malo es lo malo, pero a¨²n peor resulta que cunda el ejemplo. Efectivamente, d¨ªas despu¨¦s, en el programa televisivo La clave, el editor don Antonio Asensio ley¨® un p¨¢rrafo del ya mencionado contrato con la UPI, para demostrar que: Efe hab¨ªa vendido su primogenitura informativa. Pero, en pleno alzaguismo, no lo ley¨® entero. Si lo hubiese hecho, no se habr¨ªa equivocado ni inducido a error al resto de los participantes en el debate, ya que el texto completo es de una inocua tipicidad que no permite la menor interpretaci¨®n mal¨¦vola.
Tuvo, sin embargo, la intervenci¨®n de don Antonio Asensio la virtud de desmentir en un punto a don ¨®scar Alzaga: alguien hab¨ªa que, al menos fragmentariamente, conoc¨ªa el dichoso acuerdo, incluso en lo literal. Se podr¨¢ argumentar que no todo el mundo dispone, como el se?or Asensio, de un empleado, directivo de su agencia OTR, que sea al mismo tiempo miembro del Consejo de Administraci¨®n de Efe, y, por tanto, con acceso a todos sus contratos, pero sabido es que en este pa¨ªs siempre ha habido privilegiados, por absurdos que resulten sus privilegios y dudosas sus intenciones.
El rigor
Todo esto demuestra, una vez m¨¢s, que ten¨ªa raz¨®n quien dijo que la aportaci¨®n espa?ola al Mercado Com¨²n, frente a la modestia francesa, la tristeza italiana o la pereza alemana, ser¨¢ el rigor. Es decir, que no ser¨¢n ni don ?scar ni don Antonio quienes borren nuestra bien ganada fama de poco o nada rigurosos.
Si a ello a?adimos la no robada reputaci¨®n de catetismo, habremos completado el cuadro: con representantes as¨ª, la democracia espa?ola no necesita enemigos.
Docum¨¦ntense, se?ores, sobre lo que son las agencias de prensa en general y Efe en particular, sobre lo que no son agencias de prensa y, por encima de todo, sobre lo que son los intereses nacionales. No ser¨¢n, desde luego, los que cree defender en este caso el se?or Alzaga. ?l mismo lo reconocer¨¢ en cuanto indague un poquito, como es su deber, en lugar de informarse de o¨ªdas y de comidas.
es delegado general de Efe en Centroam¨¦rica.
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