El Atl¨¦tico conf¨ªa en sus remotas posibilidades de ser campe¨®n

El Atl¨¦tico de Madrid juega hoy (19.00 horas, TVE-1) el partido de vuelta de la final de la Copa de Europa de balonmano frente al Metaloplastika de Sabac (Yugoslavia) en el Palacio de los Deportes de Madrid. Las 9.250 localidades se agotaron el jueves y la recaudaci¨®n ascendi¨® a 3.107.000 pesetas, de la que poco m¨¢s de un mill¨®n fue para el club rojiblanco. Juan de Dios Rom¨¢n, su entrenador, asegura que hay remotas posibilidades de superar los siete goles de desventaja (12-19) de la ?da, lo que, en todo caso, suceder¨ªa s¨®lo en los ¨²ltimos minutos del encuentro.Juan de Dios Rom¨¢n sabe que el Metaloplastika no es invencible. Lo que le preocupa es "que hay que ganar por m¨¢s de siete goles de diferencia [por aquello del valor doble de los tantos conseguidos en cancha ajena en caso de igualada en el c¨®mputo global]. Ah¨ª es donde radica el problema, puesto que estamos obligados a aumentar nuestros ¨ªndices de riesgo para tratar de neutralizar su ventaja. La distinci¨®n de los matices en el planteamiento del partido de hoy es que nos da igual ganar por seis goles que perder. Tenemos que realizar una defensa numantina y arriesgar en los contraataques y en las penetraciones. Aun as¨ª, el resultado quedar¨¢ a expensas del equilibrio y los aciertos que puedan tener los jugadores del Metaloplastika".

El entrenador rojiblanco compara la misi¨®n que tiene hoy el Atl¨¦tico "a la que tendr¨ªa. la selecci¨®n de f¨²tbol si para ganar tuviera que golear a la Rep¨²blica Federal de Alemania o, todav¨ªa algo m¨¢s gr¨¢fico, que la de baloncesto tuviera que derrotar a la de Estados Unidos. Pero uno no se puede sentir vencido de antemano".

La diferencia de siete goles no servir¨¢ para que los jugadores del Metaloplastika act¨²en esta tarde confiados. Seg¨²n Juan de Dios Rom¨¢n, "al club yugoslavo lo consideran en Sabac, donde juega, como un patrimonio del pueblo. No se le perdonar¨ªa una derrota cuando tiene la victoria al alcance de la mano, despu¨¦s, adem¨¢s, de haber perdido la pasada temporada la final".

Juan de Dios Rom¨¢n sue?a con llegar al descanso con cuatro goles de ventaja, "porque pensar en m¨¢s es una utop¨ªa. El partido debe seguir sus cauces normales y, si el Atl¨¦tico juega con equilibrio y eficacia para superar los siete goles, esto no ocurrir¨ªa m¨¢s que en los ¨²ltimos minutos del encuentro".

Los jugadores del Atl¨¦tico de Madrid tienen prometida una prima de 300.000 pesetas si ganan la final. Pero el aspecto econ¨®mico no preocupa en estos momentos a la plantilla. El club a¨²n adeuda dinero de la temporada a los jugadores, cuyo rendimiento no se ver¨¢ hoy afectado por esta circunstancia, seg¨²n el entrenador, "porque, aunque con retraso, est¨¢ realizando los pagos prometidos y, adem¨¢s, tampoco componemos una plantilla superprofesionalizada".

La recaudaci¨®n de hoy no servir¨¢ para pagar los atrasos. De los 3.107.000 pesetas, coste de las 9.250 localidades -400 pesetas, la m¨¢s cara, y 100, la m¨¢s barata-, el Atl¨¦tico deber¨¢ pagar 124.280 por el impuesto de menores y 200.000 al Consejo Superior de Deportes por la cesi¨®n del Palacio de los Deportes, que fue transfer¨ª do el jueves a la Comunidad Aut¨®noma de Madrid. Una vez deduci dos estos gastos, la mitad de lo que quede tiene que ser entregado a la federaci¨®n internacional. Al Atl¨¦tico le quedan, pues, 1.391.360 pesetas, de las que hay que descontar las 250.000 de las localida des regaladas a la comunidad. Del 1.141.360 pesetas que queda, poco restar¨¢ limpio tras abonar estancias arbitrales y del contrario, atenciones y deudas contra¨ªdas en el ¨²ltimo desplazamiento.

Pero el Atl¨¦tico tendr¨¢ unos ingresos suplementarios por la pu blicidad est¨¢tica de los anuncios que se instalen alrededor de la pista del Palacio de los Deportes, al ser televisado el partido. Seg¨²n Alejandro Ortega, directivo del club, la agencia de publicidad ha prometido al Atl¨¦tico unos cuatro millones de pesetas. A cambio, el club tendr¨¢ que abonar a TVE 420.000 pesetas por la retransmisi¨®n del encuentro en directo.