El D¨ªa de las Letras Gallegas se convierte en un marco de debate sobre el idioma gallego

El D¨ªa das Letras Galegas se celebra hoy, como todos los 17 de mayo de cada a?o. La efem¨¦ride est¨¢ dedicada en esta ocasi¨®n, por acuerdo de la Real Academia Gallega, a glosar la figura de Ant¨®n Losada Di¨¦guez, un intelectual orensano que presidi¨® en 1918 la I Asamblea Nacionalista, acontecimiento de gran importancia en el devenir pol¨ªtico y cultural de Galicia. Aparte de esta dimensi¨®n hist¨®rica y oficial, la jornada es un marco de debate -con las elecciones auton¨®micas a la vista- sobre el estado de cosas de la cultura en Galicia y m¨¢s concretamente sobre la salud del idioma gallego.

Con el pr¨®logo de los Premios de la Cr¨ªtica Galicia-85, fallados en Vigo, donde se critic¨® crudamente la pol¨ªtica cultural de la Xunta y la cultura oficial gallega, este a?o, el fragor de la pol¨¦mica se ha acentuado. Pero a¨²n las cr¨ªticas m¨¢s moderadas hablan de ritmo lento en la recuperaci¨®n del idioma. Independientemente de la acci¨®n institucional, el paisaje cultural gallego ofrece evidentes signos de renovaci¨®n y reverdecimiento.La denuncia de un ritmo excesivamente lento en la recuperaci¨®n del idioma y una intensificaci¨®n de las cr¨ªticas a las instituciones por su actuaci¨®n en el terreno cultural protagonizan la vertiente no oficial en la celebraci¨®n del D¨ªa das Letras Galegas. Medios culturales e intelectuales destacan, como contraste, un pujante renacimiento -edad de oro, para algunos- en la creaci¨®n literaria y art¨ªstica. "Sobrevivimos a pesar de las instituciones", dice, tras un largo per¨ªodo de silencio, el escritor V¨ªctor Freixanes.

Al director general de Cultura, Manuel Moreira, se le atragant¨® el postre cuando el portavoz del jurado de los premios de la cr¨ªtica Galicia-85 habl¨® de "escandalosa despreocupaci¨®n" en la pol¨ªtica cultural de la Xunta. Aunque su superior, el conselleiro de Educaci¨®n y Cultura, acogi¨® con flema la referencia, Moreira consider¨® que "se hab¨ªa insultado a las instituciones auton¨®micas", y llam¨® "cavern¨ªcolas" a los anfitriones. "Dec¨ªa San Pablo que presumir es malo, pero si hay que presumir, yo tambi¨¦n tengo que hacerlo, y mi Gobierno, tambi¨¦n", se?alaba Moreira, que fue sacerdote durante 18 a?os, en unas declaraciones anteriores al incidente, en las que enumeraba los logros culturales "de la derecha en Galicia".

Moreira, que considera injusto que se le critique con tal intensidad cuando s¨®lo lleva unos meses en el cargo, tras sustituir a Luis ?lvarez Pousa, se pronuncia por un esquema no intervencionista en el campo de la cultura, no muy distante, en principio, de presupuestos progresistas. "Yo estoy para hacer menos y hacer posible que otros hagan m¨¢s".

Es precisamente la situaci¨®n del idioma la que polariza en esta jornada la pol¨¦mica cultural. Significativamente, el Premio de la Cr¨ªtica, en el apartado de iniciativas culturales, fue entregado a la Asociaci¨®n de Funcionarios para la Normalizaci¨®n Ling¨¹¨ªstica de Galicia, que, en un prolijo informe, responsabilizaba a las instituciones -incluida la auton¨®mica- del "proceso de minorizaci¨®n del idioma gallego", denunciando el incumplimiento por las administraciones de leyes que amparan y promueven su uso.

Optimistas ante al futuro

"Yo creo que hay que ser condicionadamente optimista sobre el futuro del idioma gallego", indica Domingo Garc¨ªa Sabell, presidente de la Real Academia Gallega. Seg¨²n Sabell, que re¨²ne tambi¨¦n en su persona el cargo de delegado general del Gobierno en Galicia, "la recuperaci¨®n del idioma en la vida cotidiana de una forma ubicua s¨®lo se producir¨¢ con gran lentitud; hay que irse abriendo camino; los idiomas no pueden imponerse".Ram¨®n Pi?eiro, presidente del Consello da Cultura Galega, ¨®rgano plural y consultivo, a¨²n con tono ponderado, es m¨¢s cr¨ªtico con la situaci¨®n actual. "Creo que el ritmo de compromiso activo por parte de las instituciones es m¨¢s lento de lo deseable". Pi?eiro considera que hay condicionamientos hist¨®ricos seculares que retardan la recuperaci¨®n cultural de Galicia. "No hay que ser ingenuos", proclama el catedr¨¢tico y ensayista Xes¨²s Alonso Montero. "En la Xunta, aunque predominan los que no quieren hacer nada, hay algunos que no saben y otros que no pueden".

Para Xavier Alcal¨¢, un novelista que escribe con ordenador, ingeniero de Telecomunicaciones e introductor de las nuevas tecnolog¨ªas en Galicia, no hay que achacar s¨®lo a la Xunta la par¨¢lisis cultural que predomina en las instituciones. Alcal¨¢ es autor de una irreverente novela, Tertulia, que se tendr¨¢ que presentar en Barcelona el pr¨®ximo d¨ªa 30 y que ha sido definida como "un reflejo del esperpento cultural gallego". "Es una s¨¢tira de la cultura de las vacas sagradas, responsables tambi¨¦n de lo que sucede, dice su autor, que prev¨¦ un mal recibimiento por algunas instituciones vapuleadas.

"El disparate no es exclusivo de la Xunta, sino tambi¨¦n de los grandes ayuntamientos y las diputaciones, y la pol¨ªtica socialista no es culturalmente muy distinta, en Galicia, de la de AP", afirma el joven novelista y catedr¨¢tico V¨ªctor Freixanes. En convalecencia despu¨¦s de un grav¨ªsimo accidente, el autor de O tri¨¢ngulo inscrito na circunferencia considera que lo m¨¢s interesante en la cultura gallega se produce en el ¨¢mbito individual y de la sociedad civil.

Miguel Anxo Fernan-Vello, ganador a sus 26 a?os del Premio Nacional de la Cr¨ªtica de Poes¨ªa en Lengua Gallega en 1985, coincide con esta apreciaci¨®n de Freixanes: "Estamos viviendo un momento creativo similar al de la Xeneraci¨®n N¨®s".