Margaret Schroeder cree que su marido habr¨ªa preferido morir al tormento que est¨¢ pasando con el coraz¨®n artificial
Margaret Schroeder, esposa del segundo receptor del mundo de un coraz¨®n artificial, dijo a la revista Life que su marido habr¨ªa preferido morir antes que atravesar los actuales tormentos. "Si Bill hubiera previsto la dificultad que ha supuesto para la familia, quiz¨¢ no se habr¨ªa sometido a la operaci¨®n", declar¨® la mujer del paciente, quien hace 15 d¨ªas reingres¨® en el hospital Humana, en Louisville.
Antes de que recibiera el coraz¨®n de pl¨¢stico y poliuretano Jarvik-7 el 25 de noviembre de 1984, las esperanzas de vida de Schroeder estaban contadas en unas pocas semanas, pero las circunstancias han cambiado y ahora lleva viviendo 174 d¨ªas, aunque en condiciones muy precarias.Schroeder se halla alojado en la unidad de cuidados intensivos, bajo permanente observaci¨®n, despu¨¦s del derrame que sufri¨® el pasado domingo d¨ªa 5 en el apartamento especialmente acondicionado que ocupaba frente al hospital.
Donna Hazle, jefe de relaciones p¨²blicas del Humana, dijo ayer a Efe que el estado del paciente prosigue sin variaciones dentro de la gravedad y no se prev¨¦n cambios en su tratamiento. La situaci¨®n del enfermo, quien, pese a tener 53 a?os, parece un anciano, no mejora, seg¨²n reconocieron los m¨¦dicos que le atienden, y da la impresi¨®n de que su estado se deteriora cada d¨ªa m¨¢s.
En amargas cr¨ªticas a los m¨¦dicos que atienden a su esposo, la mujer de Schroeder afirm¨® en sus declaraciones a la revista Life: "Al principio, pensamos que lo hac¨ªan por ¨¦l [la implantaci¨®n de coraz¨®n], para que pudiera volver a casa, pero ahora lo veo m¨¢s como un experimento".
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