El lado sucio de la lucha por la peseta
Madrid se convirti¨® en gran ciudad al mismo tiempo que recuper¨® la libertad, all¨¢ por la segunda mitad de la pasada d¨¦cada. Eran dos condiciones imprescindibles para que pudiera hacerse literatura negra con sus seres, lugares y situaciones. Otro requisito era que surgieran escritores con voluntad de contar, a partir de los m¨¦todos narrativos del periodismo y el cine, el lado sucio de la lucha por la peseta. Escritores que elevaran a la categor¨ªa de personajes a polic¨ªas y jueces venales, empresarios estafadores, pistoleros ultraderechistas, herederos que pierden la paciencia y otros sujetos semejantes.Pronto surgieron los escritores. Del periodismo salieron Jorge Mart¨ªnez Reverte y Juan Madrid. El primero cont¨® las andanzas de un reportero con mucho gafe, intr¨¦pido de puro ingenuo, en Demasiado para G¨¢lvez y G¨¢lvez en Euskadi. Si Mart¨ªnez Reverte es un humorista que conecta con la tradici¨®n picaresca espa?ola, Juan Madrid es, por el contrario, representante de la l¨ªnea dura en la narrativa polic¨ªaca madrile?a, un escritor de la escuela de Hammet y Chandler. Su personaje Toni Romano es un lobo solitario que ha protagonizado Un beso de amigo y Las apariencias no enga?an.
Inglaterra ha aportado una de sus caracter¨ªsticas especies raras: el hispanista. Un catedr¨¢tico de Oxford ha narrado las aventuras del comisario Bernal en tres novelas con argumentos madrile?os: S¨¢bado de Gloria, El metro de Madrid y Golpe de Reyes. Bernal es un polic¨ªa de la estirpe del Maigret de Georges Simenon, un investigador cl¨¢sico.
Carlos P¨¦rez Merinero, tras ejercer como profesor universitario y escribir sobre cine, se descolg¨® con una obra de ins¨®lita dureza, El ¨¢ngel triste. El actor F¨¦lix Rotaeta public¨® Las pistolas y tambi¨¦n le compararon con el autor de Escupir¨¦ sobre vuestra tumba, sin olvidar las novelas de otro periodista, Fernando Mart¨ªnez Lainez.
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