Un gran castigo para el g¨¦nero humano
El texto ¨ªntegro del tercer secreto de F¨¢tima, tal y como ha sido publicado por el diario Reppublica, afirma: "Un gran castigo caer¨¢ sobre todo el g¨¦nero humano en la segunda mitad del siglo XX. En ninguna parte del mundo hay orden, y Satan¨¢s reina en los puestos m¨¢s altos determinando el curso de las cosas.Satan¨¢s conseguir¨¢ introducirse hasta enslosiuestos m¨¢s altos de la Iglesia. ?l conseguir¨¢ seducir a los esp¨ªritus de los grandes cient¨ªficos que inventan armas con las cuales ser¨¢ posible destruir en pocos minutos gran parte de la humanidad. Satan¨¢s tendr¨¢ en su poder a los poderosos que gobiernan los pueblos y los empujar¨¢ a fabricar gran cantidad de armas.
Dios castigar¨¢ a los hombres con mayor severidad de lo que lo hizo ya c¨®n el diluvio. Llegar¨¢ el tiempo de los tiempos y el fin de todos los fines. Los grandes y' poderosos perecer¨¢n junto a los peque?os y los d¨¦biles.
Tambi¨¦n para la Iglesia llegar¨¢ el tiempo de sus mayores pruebas. Cardenales se opondr¨¢n a cardenales, obispos a obispos. Satan¨¢s marchar¨¢ entre sus filas y en Roma habr¨¢ cambios. La Iglesia ser¨¢ ofuscada y el mundo descompuesto por el terror.
Una gran guerra se desencadenar¨¢ en lasegunda mitad del siglo XX. Fuego y humo caer¨¢n del cielo. Las aguas de los oc¨¦ano se convertir¨¢n en vapor y su espuma se alzar¨¢ destrozando y hundi¨¦ndolo todo. Millones y millones de hombres perecer¨¢n de hora en hora. Los que quedar¨¢n vivos envidiar¨¢n a los muertos.
A cualquier parte donde se dirija la mirada habr¨¢ angustia y miseria y ruina en todos los pa¨ªses. El tiempo se acerca cada vez m¨¢s y el abismo se ensancha sin esperanza. Los buenos perecer¨¢n junto con los malos, los grandes con los peque?os, los pr¨ªncipes de la Iglesia con sus fieles, los reinantes con sus pueblos.
Habr¨¢ muerte por todas partes a causa de los errores cometidos por los insensatos y por los partidarios de Satan¨¢s, quien entonces y s¨®lo entonces reinar¨¢ en el mundo. Por ¨²ltimo, los que sobrevivir¨¢n proclamar¨¢n nuevamente a Dios y su gloria en todos los acontecimientos y lo servir¨¢n como cuando el mundo no estaba tan pervertido".
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