La televisi¨®n brit¨¢nica afirma que Jap¨®n prob¨® armas con prisioneros aliados

Cient¨ªficos japoneses que trabajaban en el desarrollo de armas biol¨®gicas durante la II Guerra Mundial inyectaron a prisioneros bacterias mort¨ªferas y efectuaron disecciones a hombres que estaban a¨²n vivos en un campo de concentraci¨®n de Manchuria, seg¨²n revel¨® el martes un programa de la televisi¨®n comercial brit¨¢nica.El programa Unidad 731. ?Lo sab¨ªa el emperador?, emitido la noche del martes, mantiene que entre 2.000 y 3.000 prisioneros, en su mayor¨ªa chinos y sovi¨¦ticos, resultaron muertos a consecuencia de esos experimentos biol¨®gicos.

Seg¨²n la referida cadena de televisi¨®n, el jefe de las fuerzas norteamericanas del Pac¨ªfico durante la II Guerra Mundial, general Douglas MacArthur, prometi¨® inmunidad a los cient¨ªficos que participaron en los experimentos a cambio de sus informes. En el programa fue exhibido un documento con el sello personal del emperador Hiro Hito en el que se autorizaba la unidad de investigaci¨®n.

Varios cient¨ªficos implicados en el caso fueron entrevistados en el programa y confirmaron la existencia de los experimentos, aunque minimizaron su participaci¨®n personal en los mismos.

Los prisioneros fueron inyectados con virus de t¨¦tanos, tifus, peste bub¨®nica, c¨®lera, disenter¨ªa y ¨¢ntrax, seg¨²n los cient¨ªficos entrevistados. Testigos japoneses afirmaron que 99 prisioneros murieron al ser expuestos a las emanaciones producidas por bombas en un experimento que ten¨ªa como objetivo comprobar el tiempo que resist¨ªan al gas.

Muchos de esos cient¨ªficos continuaron desempe?ando sus cargos como jefes de departamentos universitarios o de institutos dedicados a la investigaci¨®n. Algunos consolidaron su reputaci¨®n cient¨ªfica sobre documentos que inclu¨ªan conocimientos adquiridos en los referidos experimentos.

Por otro lado, China record¨® ayer el final de la II Guerra Mundial mediante un art¨ªculo publicado por el Diario del Pueblo, en el que se aseguraba que las tropas japonesas causaron m¨¢s muertes en la ciudad china de Nanjin que las producidas por las bombas at¨®micas arrojadas sobre Hiroshima y Nagasaki.