Jennifer Beals
La protagonista de 'Flashdance' alterna el cine con estudios de literatura norteamericana en la universidad de Yale
Jennifer Beals se encuentra en Espa?a Para promocionar el ¨²ltimo filme en el que interviene como protagonista. Se titula La prometida y en ¨¦l representa a una mujer creada por el bar¨®n Frankenstein. Despu¨¦s del ¨¦xito obtenido en Rashdance ha tenido que actuar en esta pel¨ªcula para darse cuenta de su vocaci¨®n de actriz. A los 21 a?os Jennifer Beals es una joven de una belleza muy refinada, que hace compatibles sus labores cinematogr¨¢ficas con estudios de literatura norteamericana en la universidad de Yale. Adora a Walt Whitman y a los autores de la generaci¨®n perdida, y su afici¨®n es la fotograf¨ªa.
La joven actriz naci¨® en Chicago en 1963. Su padre era un hombre de color que muri¨® cuando ella ten¨ªa nueve a?os. Su madre, una profesora de origen irland¨¦s, se cas¨® tres a?os m¨¢s tarde con un m¨¦dico. La infancia de Jennifer Beals transcurri¨® en un ambiente normal de clase media, rodeada de amigos de colegio.A los quince a?os particip¨® como extra en una pel¨ªcula, y luego siguieron varios trabajos como modelo. Cuando entr¨® en Yale no sab¨ªa muy bien cu¨¢les iban a ser sus preferencias acad¨¦micas, pero pronto se decidi¨® por la literatura de su pa¨ªs. Nombres como Scott Fitzgerald, Steinbeck, Hemingway, y otros como Hawthorne o Walt Whitman, son el centro de su inter¨¦s, y en este ¨²ltimo se detiene para hablar de su visi¨®n universalista del esp¨ªritu norteamericano al mismo tiempo que de su condici¨®n libre y marginal.
Jennifer Beals, que ser¨ªa una universitaria corriente si no fuera porque el cine ha descubierto la fascinaci¨®n que se esconde detr¨¢s de su apariencia, se muestra patri¨®tica en un sentido muy americano, aunque la pol¨ªtica del actual presidente le queda "demasiado a la derecha", y el hecho de votar le produce un "sentimiento de frustraci¨®n", por considerarlo poco efectivo.
Le interesan m¨¢s los asuntos sociales que la pol¨ªtica. "Algunas veces", dice, "me siento emocionalmente dispuesta a favor de ciertas causas. Por ejemplo ahora me preocupa lo que est¨¢ sucediendo en Sur¨¢frica. Con un realismo que demuestra mucho temperamento, asegura que no le importar¨ªa actuar en una pel¨ªcula de contenido social, algo que s¨ª podr¨ªa resultar "efectivo"..
Para ella la vida cultural en Norteam¨¦rica "depende de qu¨¦ ciudades se visiten". Considera como grupo poderoso de presi¨®n a las personas que integran la mayor¨ªa moral, y califica su postura de "desagradable", porque "el intento de censurar libros y coartar los derechos de las personas me parece equivocado".
Jennifer Beals, cuya intervenci¨®n en Flashdance la convirti¨® en un rostro popular hasta el punto de ser considerada por la revista Harper's Bazaar como una de las diez mujeres m¨¢s bellas de Norteam¨¦rica, se considera optimista y dispuesta a mantener su equilibrio mental ante las influencias exteriores. La fama no le ha impedido seguir tratando a sus amigos de antes, y quiere continuar en esta l¨ªnea. Ahora, cuando termine la fatigosa labor de la promoci¨®n, le gustar¨ªa ir al sur y hacer fotos de las corridas de toros, espect¨¢culo que la impresion¨® negativamente en otra ocasi¨®n que visit¨® Espa?a.
Quiere comprender los s¨ªmbolos que tanto interesaron a Hemingway, y con un fino sentido del humor que nunca la abandona responde a la pregunta de por qu¨¦ quiere fotografiar un espect¨¢culo que le parece "horrible" diciendo que "es lo mejor que le podr¨ªa ocurrir a un reportero despu¨¦s de venir de una guerra".
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