Vecinos del joven muerto por un polic¨ªa nacional fuera de servicio decidir¨¢n hoy si ejercen la acci¨®n popular

Un numeroso grupo de amigos y vecinos de Miguel Colorado Rodr¨ªguez, el muchacho de 19 a?os que en la madrugada del pasado s¨¢bado muri¨® en el pueblo de Vallecas por el disparo efectuado por un polic¨ªa nacional fuera de servicio, decidir¨¢n hoy en una asamblea si ejercen la acci¨®n popular ante la justicia para esclarecer las circunstancias de este caso. Esta acci¨®n se unir¨ªa a la acusaci¨®n particular que presentar¨¢n los familiares del difunto.

Miguel Colorado, que carec¨ªa de antecedentes y estaba considerado un joven de conducta normal, fue enterrado ayer por la tarde en el cementerio de Coslada. Decenas de personas acudieron al mediod¨ªa al Instituto Anat¨®mico Forense, donde estaban depositados los restos mortales del joven. Desde all¨ª acompa?aron el traslado del cad¨¢ver hasta el cementerio.En este lugar el grupo se increment¨® con varias decenas de personas m¨¢s. Adem¨¢s de los familiares y amigos del joven se encontraban presentes en la ceremonia de inhumaci¨®n muchos vecinos de Entrev¨ªas, donde viv¨ªa el joven. En todas las conversaciones los asistentes al entierro expresaron su indignaci¨®n por la muerte de Miguel Colorado, que fue alcanzado por un disparo en la parte posterior del costado derecho.

Hoy, a las nueve de la noche, se celebrar¨¢ una asamblea vecinal en la parroquia de Entrev¨ªas, donde se estudiar¨¢ el modo de iniciar el ejercicio de la acci¨®n popular en este caso y la posibilidad de adoptar otras medidas de protesta por el suceso. El autor del disparo, un polic¨ªa nacional fuera de servicio que, seg¨²n la Jefatura Superior de Polic¨ªa, intentaba defenderse de una supuesta agresi¨®n, permanec¨ªa ayer a disposici¨®n del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 21, de guardia en el momento de la muerte, y cuyo titular, Jos¨¦ Mar¨ªa V¨¢zquez Honrubia, no acudi¨® al lugar de los hechos ni a la comisar¨ªa donde se tramitaron las diligencias. Ayer fue imposible saber el lugar donde est¨¢ el polic¨ªa nacional, del que sus superiores s¨®lo han facilitado las iniciales de su nombre, que corresponden a F. M. C.

Seg¨²n varios testigos, Miguel Colorado y otros abandonaron hacia las 2.30 de la madrugada del s¨¢bado un pub del pueblo de Vallecas. En ese momento, un hombre les acus¨® de haber roto los cristales de un coche aparcado en las cercan¨ªas. Los j¨®venes negaron la acusaci¨®n y dicho individuo desapareci¨® por un momento, para al poco arrojarse sobre el grupo a bordo de un coche marca Citro?n. Colorado y una chica fueron golpeados y cayeron al suelo. Cuando se incorporaban, el hombre baj¨® del veh¨ªculo con una pistola y dispar¨® contra Colorado. A continuaci¨®n, los otros j¨®venes rodearon indignados al desconocido y rompieron los cristales de su coche.

La versi¨®n policial afirma que el agente roz¨® sin intenci¨®n con su coche al grupo y cuando baj¨® a comprobar si hab¨ªa alguien lesionado fue rodeado por los j¨®venes, que rompieron los cristales del veh¨ªculo. Por esta raz¨®n, el agente sac¨® la pistola y efectu¨® tres disparos, uno de los cuales alcanz¨® a Miguel Colorado.