Los ministros de Finanzas de la CEE reducen 396.000 millones de pesetas los gastos fijados por la Comisi¨®n Europea

Los ministros de Presupuesto de la CEE fijaron ayer en Luxemburgo, en primera lectura, los gastos de la Comunidad para 1986, reduciendo en unos 3.000 millones de ECU (396.000 millones de pesetas) el proyecto fijado por la Comisi¨®n Europea.

Esta situaci¨®n viene a agravar el problema -de cara a 1986- de la contribuci¨®n neta al presupuesto comunitario que deben realizar tanto Espa?a como Portugal, problema que los diez se han comprometido a examinar en su pr¨®xima reuni¨®n del 26 de noviembre.

Reuni¨®n maratoniana

El acuerdo se logr¨® a las siete de la ma?ana de ayer, tras 19 horas ininterrumpidas de debates. Italia, Grecia e Irlanda -los pa¨ªses m¨¢s pobres- votaron en contra, al considerar que se reduc¨ªan sobremanera las partidas destinadas a los fondos regional y social. No obstante, el Parlamento Europeo, que ahora tiene que debatir este anteproyecto de presupuesto, podr¨ªa aumentar estos fondos.

Espa?a -representada en la reuni¨®n por Miguel ?ngel Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, secretario de Estado de Econom¨ªa y Planificaci¨®n- y Portugal, que asistieron como observadores, tambi¨¦n mostraron su desaprobaci¨®n ante el acuerdo a diez.

Espa?a teme que su posici¨®n en 1986 se traduzca en una contribuci¨®n neta a las arcas de la Comunidad Europea equivalente a 240 millones de ECU (unos 32.000 millones de pesetas), y para compensar esta situaci¨®n pidi¨® mayores gastos en pol¨ªtica agr¨ªcola, regional, social y pesquera. Una petici¨®n que la CEE ha desatendido por el momento.

Espa?a, a raiz del tratado de adhesi¨®n, se comprometi¨® a pagar a las arcas de la CEE su contribuci¨®n total de IVA, adem¨¢s de una parte, gradualmente creciente, de los ingresos por pagos de aranceles agr¨ªcolas e industriales a la importaci¨®n de pa¨ªses terceros. Como las diversas pol¨ªticas comunitarias, y muy especialmente la agr¨ªcola, s¨®lo se ir¨¢n aplicando gradualmente a Espa?a, se acord¨® que se reembolsar¨ªa a Espa?a parte de su contribuci¨®n en IVA (87% en 1986, 70% en 1987, 55% en 1988, 40% en 1989, 25% en 1990 y 5% en 1991).

Oposici¨®n espa?ola

De hecho, en el acuerdo firmado con la CEE, Espa?a consigui¨® obtener una devoluci¨®n superior a la que esperaba en los primeros a?os, lo que equivaldr¨¢ a acumular un cierto d¨¦ficit neto entre lo que pague y lo que reciba en los ¨²ltimos (al final del per¨ªodo transitorio, Espa?a debe recibir un saldo neto de la CEE entre 500 y 1.000 millones de ECU -entre 66.000 y 132.000 millones de pesetas-).

El problema es que estos datos se calcularon sobre una aportaci¨®n a la CEE del 1% de la recaudaci¨®n obtenida por el IVA y no del 1,4% que entrar¨¢ en vigor en 1986, con objeto de ampliar los recursos propios de la CEE. Estos dato, de cualquier forma, son poco solventes, pues buena parte de lo que vaya recibiendo Espa?a depender¨¢ de su capacidad y velocidad para asimilar los programas y las pol¨ªticas de la CEE.

Seg¨²n la Comisi¨®n Europea, Espa?a y Portugal pagar¨¢n en 1986 a la CEE unos 3.000 millones de ECU, se les devolver¨¢ unos 1.800 millones y se les pagar¨¢ de los fondos comunitarios 1.300 millones, con lo que deber¨ªan ser beneficiarios netos en unos 100 millones de ECU (13.200 millones de pesetas). Sin embargo, Espa?a contesta ahora estas cifras.

En todo caso, el presupuesto de la CEE se presta a diversas interpretaciones seg¨²n se tome en cuenta los pagos reales en 1986 (32.000 millones de ECU en el anteproyecto fijado) o los compromisos contra¨ªdos (que se pueden pagar luego), lo que arroja una cifra de 34.218 millones de ECU.