Localizado con vida un ni?o de nueve a?os entre los escombros del terremoto de M¨¦xico
Un ni?o de nueve a?os, Luis Ramano Ram¨®n Nafarte, fue localizado con vida bajo toneladas de escombros dos semanas despu¨¦s del terremoto que asol¨® la capital mexicana y cost¨® la vida a miles de personas y destroz¨® m¨¢s de 1.000 edificios. Sin embargo, hasta la ma?ana de ayer los equipos de rescate todav¨ªa no hab¨ªan conseguido sacar al ni?o.
Al pasar junto a las ruinas de un edificio del centro de la capital, unos polic¨ªas oyeron ruidos, que atribuyeron a las ratas o a un gato que se mov¨ªa entre los escombros. Los ruidos siguieron, y llamaron a los equipos de rescate, que pidieron a gritos que si all¨ª hab¨ªa alguien, diese dos golpes. Desde toneladas de escombros lleg¨® a la superficie un toc-toc. Se trata del ni?o Luis Ramano Ram¨®n Nafarte, que hab¨ªa quedado sepultado el d¨ªa del terremoto junto con su abuelo. Empezaron febrilmente las tareas de rescate, que duraron toda la noche del mi¨¦rcoles al jueves, pero hasta la ma?ana de ayer no se hab¨ªa logrado rescatar al ni?o, ya que los trabajos eran sumamente dif¨ªciles.M¨¦xico sigue temblando. La ciudad no ces¨® de moverse desde el pasado d¨ªa 19. Ayer, a las nueve de la ma?ana, hora local (cuatro de la tarde, hora peninsular espa?ola), volvi¨® a sentirse un temblor. El nerviosismo de muchos habitantes de la capital, incluso el miedo, es palpable. Todos hablan de trastornos psicol¨®gicos, hasta el punto de que la Prensa public¨® ayer una p¨¢gina entera con un anuncio de la Comisi¨®n Metropolitana de Emergencia sobre un programa de salud mental relacionado con el desastre.
En conversaciones con conocidos, muchos se quejan de sufrir pesadillas por la noche; otros hablan de exiliados residentes en M¨¦xico que han decidido marcharse del pa¨ªs. La esposa de un periodista recuerda con horror que padeci¨® varios minutos de amnesia y se olvid¨® incluso de que hab¨ªa ocurrido un terremoto. A trav¨¦s de la televisi¨®n se dan consejos sobre c¨®mo afrontar el problema con los ni?os y se recomienda que los peque?os jueguen al terremoto, quiz¨¢ para conseguir un efecto cat¨¢rtico.
Las complicaciones derivadas del terremoto con influencia sobre la vida cotidiana son continuas. Desde los que han perdido su trabajo -como unas 40.000 modistas que trabajaban en talleres destruidos- hasta el que no puede cobrar su n¨®mina quincenal porque los documentos quedaron enterrados bajo los escombros.
Por otra parte, con motivo del 17? aniversario de la matanza de Tlatelolco, ocurrida en 1968, varios grupos de izquierda convocaron a una manifestaci¨®n el mi¨¦rcoles por la tarde. En estos momentos, con los edificios cercanos al lugar de la matanza destruidos y la asociaci¨®n con los sucesos de 1968, se pod¨ªa esperar una cierta movilizaci¨®n popular. El resultado fue penoso. En dos manifestaciones paralelas se consigui¨® reunir s¨®lo a unas 5.000 personas. De nuevo, se form¨® sobre las calles de la capital mexicana la sopa de letras compuesta por las siglas de todo un sinf¨ªn de partidos, grupos y grup¨²sculos, incapaces de canalizar el movimiento popular surgido a ra¨ªz del terremoto.
La manifestaci¨®n principal recorri¨® el paseo de la Reforma, desde el bosque de Chapultepec hasta la estatua del ?ngel de la Independencia. Los manifestantes corearon los gritos de siempre, y casi daba la impresi¨®n de que all¨ª no hab¨ªa pasado nada. Apenas hab¨ªa referencias al terremoto, salvo en algunos gritos, como: "Desalojo, desalojo al presidente, para que vea lo que se siente".
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