El reglamento del IVA permite la entrada en vigor en enero del impuesto al consumo vigente en la CEE

La aprobaci¨®n en el Consejo de Ministros de ayer del reglamento del impuesto sobre el valor a?adido (IVA) abre el camino legal para la implantaci¨®n del nuevo impuesto al consumo desde el pr¨®ximo 1 de enero. El IVA, que representa la obligada adaptaci¨®n fiscal de Espa?a a la CEE, proporcionar¨¢ unos ingresos anuales al Estado de m¨¢s de 1,5 billones de pesetas. A pesar del peligro inflacionario y los problemas de gesti¨®n y control del nuevo impuesto, el Gobierno ha preferido no retrasar su implantaci¨®n, desoyendo las peticiones de la derecha y los empresarios, bajo el argumento de que "nunca ser¨ªa el momento oportuno de aplicarlo".

Tras la reforma fiscal sobre la renta, aplicada desde 1978 y con profundos retoques planteados este a?o por el Gobierno para su aprobaci¨®n en el Congreso, ahora el IVA representa una verdadera revoluci¨®n de la imposici¨®n indirecta.El reglamento aprobado ayer contiene 198 art¨ªculos, ocho disposiciones transitorias y un anexo: un total de 285 p¨¢ginas en el que se especifican la gesti¨®n y condiciones de tributaci¨®n del nuevo impuesto.

El IVA va a modificar sustancialmente toda la imposici¨®n indirecta, absorbiendo a otros 24 tributos o tasas sobre el consumo, aunque convivir¨¢ con algunos impuestos especiales. En primer lugar, ampl¨ªa enormemente el ¨¢mbito de sujetos pasivos de la imposici¨®n indirecta, extendi¨¦ndola a 600.000 profesionales, as¨ª como a los minoristas, agricultores y pescadores. Cualquiera que realiza una actividad comercial continuada -se calcula que los afectados ser¨¢n 2,4 milones de contribuyentes- estar¨¢ sometido al impuesto. Pero desde el punto de vista de la presi¨®n fiscal, si bien todos los sectores econ¨®micos afectados adivinan problemas o plantean quejas por su aplicaci¨®n, el consumidor es el ¨²nico que soportar¨¢ el impuesto. Los dem¨¢s son meros intermediarios para su c¨¢lculo y gesti¨®n.

La Administraci¨®n ha presupuestado para 1986 ingresos de 1,353 billones en concepto de IVA, pero referidos a nueve meses, ya que el primer trimestre ser¨¢ un per¨ªodo transitorio entre los dos reg¨ªmenes impositivos. Sin embargo, Hacienda no descarta que los ingresos sean superiores, pero en ese caso se deber¨ªa a que la inspecci¨®n funciona o a que se ha producido una reactivaci¨®n de la econom¨ªa".

Productos con tres tipos

El IVA, adem¨¢s homogeneizador, va a ser un instrumento centralizador. Las comunidades aut¨®nomas, diputaciones y ayuntamientos dejar¨¢n de gestionar y recaudar determinados tributos, que pasan a ser competencia del Estado central, y ser¨¢n compensados v¨ªa Presupuestos con 220.000 millones de pesetas.

El IVA gravar¨¢ los productos al consumo con tres tipos impositivos. El general, del 12%, ser¨¢ aplicable a la mayor¨ªa de los productos. Un tipo reducido del 6% ser¨¢ el empleado para los productos alimenticios; las sustancias vegetales o animales destinadas a la producci¨®n de alimentos; los libros, revistas o peri¨®dicos; los medicamentos y el material sanitario; las viviendas y garajes, excluidos los locales de negocios; el material escolar, con excepci¨®n de los utensilios electr¨®nicos; los transportes terrestres y equipajes; la hosteler¨ªa, salvo los restaurantes de cinco tenedores y los hoteles de cinco estrellas; los sevicios de limpieza urbana; las ferias y exposiciones comerciales, y lo relacionado con la industria del cine y del teatro, con la salvedad de las pel¨ªculas X, que soportar¨¢n el tipo m¨¢ximo. El gravamen m¨¢ximo, del 33 %,est¨¢ reservado, en t¨¦rminos generales, a los productos que soportan el impuesto sobre el lujo.

El nuevo impuesto grava el valor a?adido que adquieren los productos en cada proceso de transformaci¨®n o comercializaci¨®n. Es decir, se trata de un recargo fiscal sobre el precio que se a?ade al producto desde la materia prima hasta el consumo final. El c¨¢lculo y facturaci¨®n del impuesto se va haciendo paso a paso. Seg¨²n los expertos, los datos que proporciona el IVA son indispensables para una pol¨ªtica de planificaci¨®n y de actuaci¨®n eficaz sobre los precios.

Cada empresario o intermediario en la transformaci¨®n y comercializaci¨®n del producto calcula el IVA derivado del precio de sus productos (IVA devengado) y le resta el IVA que le ha cargado a ¨¦l su proveedor (IVA soportado). La diferencia se ingresa en Hacienda, aunque no supone coste para empresas o intermediar¨ªos, porque va cargado en el precio que se factura al cliente, hasta llegar al consumidor, el ¨²nico que verdaderamente corre con su importe. Si la diferencia es negativa, la empresa perjudicada puede pedir la devoluci¨®n a Hacienda.

Los productos exportados est¨¢n exentos del IVA, pero, paralelamente, desaparece la desgravaci¨®n fiscal a la exportaci¨®n. Las importaciones, que s¨ª est¨¢r¨¢n gravadas, aportaran el 40% de los ingresos. La facturaci¨®n se har¨¢ trimestralmente, salvo en las empresas con facturaci¨®n anual superior a los 1.000 millones de pesetas, que la har¨¢n mensualmente.

El control fiscal

Todos los afectados est¨¢n obligados a llevar un registro de facturas. De esta forma el IVA se convierte en un mecanismo eficaz contra el fraude y la econom¨ªa sumergida. La ocultaci¨®n fiscal exigir¨¢ en el futuro que toda la cadena de transmisiones de productos permanezca oculta, porque un fallo puede, te¨®ricamente, poner todo el proceso al descubierto. Esta obligaci¨®n de registrar formalmente todas las compraventas se sustenta en un severo r¨¦gimen de infracciones y sanciones, que pueden llegar hasta el 500 por 100 del recargo omitido.

El r¨¦gimen general tiene tres excepciones, aunque el proyecto de Hacienda es que en el futuro afecte a todos. Los agricultores est¨¢n exentos de facturar el IVA y s¨®lo tendr¨¢n que guardar las facturas de los cinco ¨²ltimos a?os. Pueden optar, sin embargo, al r¨¦gimen ordinario, beneficioso, por ejemplo, para los agricultores exportadores.

Los comerciantes individuales minoristas, un colectivo numeroso y "casi imposible de controlar", tendr¨¢n que liquidar de las facturas de sus proveedores un recargo de equivalencia del 3%, aunque existe un tipo reducido del 1 %. Como ejemplo, el porcentaje del 3% equivale a un margen comercial neto del 25%.

Los empresarios que facture anualmente por debajo de 50 millones de pesetas pueden optar por acogerse a un r¨¦gimen simplificado. El Gobierno aprobar¨¢ por orden ministerial unos m¨®dulos est¨¢ndar del volumen de negocio, que multiplicado por las ventas dar¨¢n la cantidad a ingresar en Hacienda.