El PSOE gallego pide el voto con la mirada puesta en Madrid

"Convennos que ga?en os socialistas" ("Nos conviene que ganen los socialistas"). Todo el impulso material y humano del Partido dos Socialistas Galegos-PSOE (PSG-PSOE) se ha encauzado hacia el ejercicio intelectual de conseguir que los ciudadanos gallegos interioricen ese mensaje pragm¨¢tico y desideologizado y lo plasmen en forma de voto el pr¨®ximo 24 de noviembre. Los socialistas han renunciado a conseguir un voto doctrinal y piden al electorado que "mire a Madrid", all¨ª donde est¨¢ el poder, precisamente en manos del PSOE.

Entre los "intereses y las convenencias" se est¨¢ moviendo el mensaje electoral socialista -Modernizar interesa, dice su eslogan oficial-, para descansar en tres soportes: La Galicia "desgobernada" durante cuatro a?os por la coalici¨®n de derechas; la necesidad del voto ¨²til -en consonancia con Madrid- y la pr¨®xima inco rporaci¨®n de Espa?a / Galicia en la CEE.El presunto desgobierno de esta comunidad lo han mantenido los socialistas con rotundidad, a?adiendo a este apartado la obligada referencia a los innombrados caciques. "Vamos a acabar con la Galicia del caciquismo, la que nos mantiene en el costumbrismo de la gaita y la empanada", viene a decir en todos los actos el candidato a la Xunta por el PSG-PSOE, Femando Gonz¨¢lez Laxe.

Madrid y Bruselas

"La sensaci¨®n de desgobierno que tienen los gallegos es un hecho, nadie lo duda", afirma convencido el socialista Manuel Soto, alcalde de Vigo y cabez¨¢ de lista por Pontevedra. Es en este momento del discurso cuando los socialistas repiten enf¨¢ticamente a quienes les escuchen que miren a Madrid, que recuerden qui¨¦n gobierna en Espa?a. "Nuestro pueblo sabe que en 1986 el PSOE ganar¨¢ las elecciones y que, por tanto, le conviene que los socialistas tambi¨¦n gobiernen aqu¨ª, por los beneficios que de ello obtendr¨¢n", afirma Soto.El tercer elemento de la campa?a socialista tiene a Bruselas como referente. "La gente, aunque no conozca los detalles, sabe que entramos en la CEE y que ser¨¢n los socialistas los que tendr¨¢n que resolver la papeleta", interpreta uno de los coordinadores de la campa?a socialista.

Gonz¨¢lez Laxe, por su experiencia al frente de la Direcci¨®n General de Ordenaci¨®n Pesquera y miembro cualificado de la delegaci¨®n espa?ola negociadora con la Comunidad, piensa explotar al m¨¢ximo este bagaje. "El resultado de mi gesti¨®n de los dos ¨²ltimos a?os es innegable. Coalici¨®n Popular se encuentra imposibilitada para hablar mal de m¨ª en toda la costa gallega", presume Gonz¨¢lez Laxe. No parece casualidad que el candidato socialista haya aceptado en estas fechas recibir tantos homenajes como las cofrad¨ªas de pescadores seari capaces de ofrecerle.

"Te hemos pedido mucho estos a?os, y si llegas a presidente de la Xunta, que Dios lo quiera, te seguiremos pidiendo", le espetaba d¨ªas atr¨¢s, con tono sobrio, el presidente de la Cofrad¨ªa de la R¨ªa de Sada. "En la costa las perspectivas son inmejorables, ah¨ª no vamos a tener problemas gracias a Fernando", afirmaba Jos¨¦ Giraldes, coordinador de la campa?a socialista en Pontevedra. Otra cosa es el interior, la Galicia rural.

Esta Galicia desconocida hasta hace un mes por Gonz¨¢lez Laxe, con m¨¢s de 120.000 explotaciones, de no m¨¢s de cuatro vacas cada una, con gentes poco inclinadas al asociacionismo; a las causas comunes y harto desconfiadas de los pol¨ªticos, requer¨ªa otro mensaje electoral. As¨ª lo comprendi¨® el candidato en la precampa?a cuando compareci¨® ante un auditorio de ganaderos que le recibieron con todas las reservas posibles, que no son diferentes de las que mantienen ante cualquier pol¨ªtico.

Gonz¨¢lez Laxe habl¨® de la selecci¨®n de la raza vacuna, de la patolog¨ªa de los animales y su nutrici¨®n, de los siete a?os de adaptabi¨®n que Espa?a / Galicia tendr¨¢ hasta que la producci¨®n de leche deba ajustarse plenamente a los c¨¢nones comunitarios. "Habla usted de modernizaci¨®n y nuevas t¨¦cnicas y se olvida que en muchas zonas no tenemos luz, ni escuelas, ni m¨¦dicos; en el campo no todo son vacas", record¨® un ganadero a Gonz¨¢lez Laxe.

Los restos de crisis

Quince diputados es la fuerza con la que han contado los socialistas en el Parlamento aut¨®nomo, de los 71 que lo componen, seg¨²n los resultados que obtuvieron en las elecciones de 1981. En los ¨²ltirnos d¨ªas no se han recatado en afirmar p¨²blicamente un sonoro "vamos a ganar", aunque en.privado sus previsiones son s¨®lo las de experimentar un fuerte crecimiento, tambi¨¦n admitido por Coalici¨®n Popular."Es falso que los socialistas gallegos estemos divididos", dec¨ªa Fernando Gonz¨¢lez Laxe. "Ha habido diferentes matices pol¨ªticos, pero los dejamos a un lado cuando se trata de luchar por los intereses de Galicia", afirmaba el alcalde de Vigo, Manuel Soto. "La leg¨ªtima pugna interna est¨¢ cerrada", proclamaba Miguel Barros, dirigente vigu¨¦s.

Esta cadena de declaraciones d¨ªas antes de que comenzara oficialmente la campa?a ha intentado borrar del subconsciente de los contrincantes pol¨ªticos y de la ciudadan¨ªa aquel tormentoso congreso de enero en Orense, donde la Ejecutiva de los socialistas gallegos result¨® elegida por un 32% de los votos, en medio de duras descalificaciones personales.

Los perdedores del congreso de Orense, Manuel Soto a la cabeza, que aspiraba junto a sus seguidores a salir de esa asamblea ungido como candidato a la Xunta, contin¨²an sin asumir que la secretar¨ªa general del PSG-PSOE la ostente Antol¨ªn S¨¢nchez Presedo, hombre aupado desde la ejecutiva federal del PSOE, v¨ªa Francisco V¨¢zquez, alcalde de La Coru?a, en abierta liza con su hom¨®logo de Vigo.

Las diferencias entre socialistas no parecen afectar a Fernando Gonz¨¢lez Laxe por la tranquilidad que le confiere haber resultado elegido candidato a la presidencia del Gobierno aut¨®nomo con la unanimidad de todos los miembros del comit¨¦ nacional gallego socialistas.