La ORA no ha servido para mejorar la velocidad del tr¨¢fico en el centro, seg¨²n Francisco Herrera

Una investigaci¨®n realizada por el concejal del PCE Francisco Herrera, en base a datos obtenidos en el propio Ayuntamiento, revela que la velocidad en el centro de la ciudad se encuentra en el punto m¨¢s bajo desde 1975. Esto, en opini¨®n de Herrera, anula los objetivos de la Operaci¨®n de la Regulaci¨®n del Aparcamiento (ORA), puesta en marcha en noviembre de hace cinco a?os. Sin embargo, seg¨²n la concejal¨ªa de Circulaci¨®n de Ayuntamiento de Madrid, el tr¨¢fico est¨¢ aumentando su velocidad, al mismo tiempo que su intensidad.

Cuando en noviembre de 1980 se puso en marcha la Operaci¨®n de la Regulaci¨®n del Aparcamiento (ORA) sus objetivos principales eran: aumentar la velocidad de circulaci¨®n en el centro de la ciudad; disminuci¨®n del tr¨¢fico, gracias al efecto disuasorio de la medida, y, consecuentemente, descenso de la contaminaci¨®n y el ruido; aumento del volumen de viajeros en transporte p¨²blico. "Objetivos que no se han cumplido", indica el concejal del PCE Francisco Herrera, "porque puedo demostrar que la velocidad en el centro de la ciudad est¨¢ en el punto m¨¢s bajo de la historia, el tr¨¢fico ha aumentado, ha disminuido la utilizaci¨®n del transporte p¨²blico y la habitabilidad sigue igual, porque el centro sigue siendo una zona altamente contaminada".Esta opini¨®n del concejal comunista s¨®lo es compartida en el punto del aumento de tr¨¢fico por la concejal¨ªa de Circulaci¨®n, dirigida por el socialista Valent¨ªn Medel. Seg¨²n los estudios mensuales realizados por dicha concejal¨ªa, la intensidad de tr¨¢fico en la zona centro aument¨® en 7.221 autom¨®viles en octubre de 1985 respecto al mismo mes del a?o anterior. En cuanto al aumento de la velocidad, mientras que la citada concejal¨ªa afirma que la velocidad de los autobuses en el centro de la ciudad se sit¨²a en 15,4 kil¨®metros por hora, Francisco Herrera recuerda que en octubre de 1981 esta velocidad alcanzaba los 18,2 kil¨®metros por hora para cualquier tipo de veh¨ªculo.

Menos viajeros en la EMT

Los datos sobre utilizaci¨®n de autobuses de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) tampoco concuerdan. La nota de la concejal¨ªa de Circulaci¨®n afirma que "los viajeros que utilizan el autob¨²s ha aumentado considerable mente, comparando el mes de octubre de 1984 y el mismo mes de 1985", afirmaci¨®n que es revocada por Herrera, que cita la memoria oficial de la EMT, en la que se ob serva que los viajeros han ido disminuyendo progresivamente Mientras que en 1982 hubo 478 millones de viajeros por a?o, en 1985 se habr¨¢n contabilizado 454 millones, 14 millones m¨¢s que lo estimado en los presupuestos del Ayuntamiento que se aprobaron en la sesi¨®n plenaria del pasado mes de noviembre.

Contaminaci¨®n alta

Por ¨²ltimo, para Herrera, no se ha cumplido tampoco el objetivo de mejorar la habitabilidad del ¨¢rea central de la ciudad con la puesta en marcha de la ORA, ya que Ia situaci¨®n sigue tan mal como siempre".

El jueves 12 de diciembre, los ¨ªndices medios de contaminaci¨®n fueron superiores al tope m¨¢ximo permitido debido a un aumento del ¨®xido de azufre y humos en zonas del centro tales como el paseo de Recoletos, puerta del Sol, glorieta de Quevedo, plaza de Mara?¨®n, plaza de Salamanca, plaza de Luca de Tena, glorieta de Cuatro Caminos, Ram¨®n y Caja?, plaza de Manuel Becerra y plaza de Castilla. Dos d¨ªas antes, Jorge Tinas, director de Medio Ambiente, afirm¨® que esta situaci¨®n se deb¨ªa a las calefacciones y a las aglomeraciones de tr¨¢fico.

Herrera indica que si a estos factores se a?ade "el descenso de venta de boletos de la ORA 1,6 millones con su entrada en vigor en 1980, 1.175.000 en octubre de 1985- y que el n¨²mero de multas que se pagan en relaci¨®n con las que se ponen no supera en ning¨²n caso el 10%", su conclusi¨®n es que "no es aventurado afirmar que la ORA, en t¨¦rminos reales, no existe". "Es decir, a?ade, "existe una medida de regulaci¨®n del aparcamiento, que un peque?o sector de ciudadanos respeta, pero que carece de eficacia en relaci¨®n con el tr¨¢fico de la ciudad'.

Para el concejal comunista, "el fracaso se debe a que no ha funcionado el factor de disuasi¨®n, ya que las multas no se pagan -en relaci¨®n con las que se ponen no supera en ning¨²n caso el 10%-, no ha habido inversiones fuertes en el transporte p¨²blico capaz de dar una oferta realmente disuasoria respecto al veh¨ªculo privado, el Ayuntamiento sigue sin disponer de un padr¨®n actualizado del parque de coches de Madrid, as¨ª como la pol¨ªtica de construcci¨®n de aparcamientos dentro del per¨ªmetro de la ORA que anima a la utilizaci¨®n del transporte privado".

Medidas poco disuasorias

En este sentido hay que se?alar que hay aparcamientos para residentes en fase de contrucci¨®n en San Francisco de Sales, Mercado de Pescados, paseo de Rosales, etc¨¦tera, "cuando estos aparcamientos deb¨ªan construirse, y as¨ª se idearon, en la zona exterior de la ORA, como factor de disuasi¨®n a los residentes para no utilizar el coche en sus viajes al centro", indica.

Sin embargo, el portavoz del PCE en el Ayuntamiento de Madrid afirma que "la ORA es necesaria, imprescindible para la ciudad", pero, a?ade "no tal y como se aplica ahora porque su situaci¨®n de deterioro es tal, que, o se producen a corto plazo medidas radicales y profundas en t¨¦rminos de gesti¨®n municipal, o no habr¨¢ otra salida que su desaparici¨®n". En definitiva, para Herrera "el problema no est¨¢ en la legalidad o ilegalidad de la normativa que la regula, sino en su eficacia en relaci¨®n con los problemas que deb¨ªa resolver".