El alto funcionario cubano asaltado en Madrid dice que iba a ser secuestrado porque ten¨ªa informaci¨®n muy confidencial
El viceministro cubano Manuel Antonio S¨¢nchez P¨¦rez declar¨® ayer a EL PA?S que los funcionarios de la Embajada intentaron secuestrarle por el temor a que facilitara o vendiera la informaci¨®n confidencial que posee sobre la econom¨ªa de su pa¨ªs. "Fue un intento desesperado de secuestro que habr¨ªa terminado con mi fusilamiento", afirma. S¨¢nchez P¨¦rez niega tener vinculaci¨®n alguna con los servicios de informaci¨®n cubanos, afirma que no quiere viajar a Estados Unidos y justifica su deserci¨®n por profundas divergencias con el sistema pol¨ªtico de su pa¨ªs. S¨¢nchez P¨¦rez reconoce que tiene en una cuenta cerca de 70 millones de pesetas, y que la importante informaci¨®n que posee no va a venderla a nadie, sino que la utilizar¨¢ para escribir un libro.
Durante la entrevista que se llev¨® a cabo en el restaurante La rana verde, de Aranjuez, S¨¢nchez P¨¦rez afirm¨® que no desea trasladarse a los Estados Unidos y justific¨® los 70 millones de pesetas que posee en una oficina bancaria de Madrid como producto de comisiones en transacciones comerciales que realiz¨® al margen de los fondos oficiales como intermediario -a trav¨¦s de terceras personas- utilizando las relaciones que obtuvo como alto funcionario del Gobierno. El viceministro asegur¨® que a trav¨¦s de una firma con sede en Gran Breta?a altos funcionarios cubanos est¨¢n sacando clandestinamente dinero fuera del pa¨ªs.Manuel Antonio S¨¢nchez P¨¦rez permaneci¨® durante 10 a?os en la Junta Central de Planificaci¨®n, ¨®rgano rector de la econom¨ªa cubana, y otros 10 en el Comit¨¦ de Abastecimiento y Material. "Fui", dice, director de inversiones y director general de Planificaci¨®n y recientemente iba a ser promovido a asesor directo del ministro".
"Fui fiel y convencido entusiasta del sistema cubano", afirma, "pensando que detr¨¢s hab¨ªa justicia social, pero comenc¨¦ a ver que el sistema econ¨®mico era ineficiente. Realic¨¦ varias propuestas para buscar medidas descentralizadoras que no fueron aceptadas por altos cargos del Gobierno. Entoces llegu¨¦ a la convicci¨®n de que el sistema no cumpl¨ªa el objetivo del bienestar social que preconiza".
El viceministro cubano dice que opt¨® por "practicar oposici¨®n desde el exterior" y que ahora tiene la intenci¨®n de escribir un libro que se llamar¨¢ El proceso cubano: Mitos y realidades, para lo cual posee una amplia documentaci¨®n "tanto escrita como mental" y donde pretende analizar el sistema y proponer alternativas con el objetivo de buscar la transformaci¨®n del pa¨ªs.
"No voy a aliarme", a?ade, "con movimientos que atacan el modelo cubano y que responden a determinados intereses como los norteamericanos, que son hegem¨®nicos. Por eso no estoy en los Estados Unidos y no quisiera viajar all¨ª porque s¨¦ que ser¨ªa sometido a presiones".
"Acci¨®n cobarde"
"A partir de ah¨ª me planteo mi solicitud de asilo en Espa?a" a?ade, "y lamento tremedamente el incidente, que ojal¨¢ no hubiera ocurrido. Fue una acci¨®n violenta y cobarde y es falsa la versi¨®n del Gobierno cubano de que quer¨ªan hablar conmigo. Quer¨ªan llevarme a Cuba donde ser¨ªa fusilado porque ¨¦se era el objetivo final"`.
El viceministro cubano justifica el intento desesperado de su secuestro -en pleno centro de Madrid y a una hora de gran concurrencia, las 10.30- en que ellos tem¨ªan que facilitase o vendiese informaci¨®n sobre la econom¨ªa cubana, "y por eso se arriesgaron a llevar esa acci¨®n a cabo". "Yo domino perfectamente cu¨¢l es el programa de desarrollo de los pr¨®ximos 15 a?os en Cuba", afirma, "pero a m¨ª no me interesa revelarlo a nadie porque a los que les interesa lo utilizar¨ªan contra mi pa¨ªs y se da?ar¨ªa al pueblo. Es una actitud inmadura la de los norteamericanos al asediar econ¨®mica y militarmente a Cuba. ?sa no es la v¨ªa".
Dinero fuera de Cuba
El viceministro argumenta que busc¨® los fondos que guarda a fin de obtener la independencia necesaria para escribir su libro. "Hace nueve meses", dice, "aprovechando las relaciones de mi cargo, comenc¨¦ a hacer operaciones financieras al margen de los fondos cubanos. Yo era centro de grandes negocios comerciales. Es usual que el intermediario cobre una comisi¨®n. No en Cuba, que est¨¢ prohibido. Yo comienzo a hacer uso de esas comisiones. Utilizo relaciones de terceros. Comienzo a ser intermediario en diferentes firmas hasta que consigo la cantidad que yo estimo para financiar el libro". "En Cuba", a?ade, "fue fusilado en 1984 el viceministro del Banco Nacional, Jos¨¦ Garc¨ªa Pe?a, por detect¨¢rsele una cuenta a su nombre, al parecer, en Espa?a o Suiza, que abri¨® no s¨¦ con qu¨¦ fines. Por ese motivo yo lo hago con mucha reserva. Utilizamos una firma brit¨¢nica que se llama ETCO, que tiene capital brit¨¢nico y cubano, que funciona para dar mayor flexibilidad a las operaciones cubanas, aunque no siempre tiene que dar la cara el Estado oficialmente. Tambi¨¦n sirve para otras operaciones. A su vez tiene cuentas no controladas oficialmente por el Banco Nacional de Cuba, que se utilizan piara sacar fondos clandestinamente y en la que est¨¢ involucrada mucha gente cuyos nombres no voy a revelar".
El viceministro manifiesta que actualmente "existe una corriente de escepticismo bastante masivo, pero que no ha llegado a la reacci¨®n en contra. Se ha perdido el entusiasmo y en altas instancias se est¨¢ criticando el sistema cubano, aunque se hace con mucha reserva por razones obvias de seguridad".
"Yo", dice, "ordeno entonces el traslado del dinero a Panam¨¢, pero lo detectan y lo traslado a Espa?a. Si mi intenci¨®n fuera robar ese dinero habr¨ªa cogido un malet¨ªn y me habr¨ªa trasladado a los Estados Unidos, donde nadie me iba a preguntar por su procedencia".
"Ped¨ª permiso", a?ade, "para salir porque ten¨ªa que ir a Berl¨ªn Oriental, donde estoy haciendo un curso de doctorado; y a la vez solicito permiso para ir a Espa?a porque hay una feria de electr¨®nica. Es entonces cuando solicito el asilo. Para ello me entrevisto con un funcionario de la Embajada norteamericana, pero s¨®lo para pedirle informaci¨®n de qu¨¦ debo hacer para solicitar eso en Espa?a, a lo cual me responde que dirigi¨¦ndome a la polic¨ªa. Hablo con este hombre porque no sab¨ªa cu¨¢l era el tr¨¢mite que deb¨ªa seguir y me pareci¨® una v¨ªa m¨¢s segura".
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