Tensa reuni¨®n entre Cossiga y el Consejo Superior de la Magistratura italiana

El encuentro mantenido en la noche del jueves entre el presidente de la Rep¨²blica Italiana, el democristiano Francesco Cossiga, y el Consejo Superior de la Magistratura, del cual el jefe del Estado es el primer responsable, fue tenso y sin acuerdos. Era la primera reuni¨®n plenaria tras las jornadas de enfrentamiento institucional de primeros de mes, calificadas de "dram¨¢ticas" por el mismo Cossiga.

La crisis entre la Presidencia de la Rep¨²blica y el ¨®rgano supremo de la magistratura estall¨® cuando Cossiga impidi¨® al Consejo Superior de la Magistratura comentar o discutir las cr¨ªticas del presidente del Gobierno, Bettino Craxi, contra los jueces, con motivo de la condena judicial de algunos diputados y periodistas socialistas.En aquella ocasi¨®n, los 20 miembros togados del Consejo Superior de la Magistratura hab¨ªan presentado sus dimisiones al jefe del Estado, quien les rog¨® que las retiraran para no abrir un conflicto institucional en el pa¨ªs. Los jueces lo hicieron, pero pidieron una reuni¨®n plenaria con el jefe del Estado, que se celebr¨® ayer.

El presidente de la Rep¨²blica fue claro y tajante con el ¨®rgano supremo de la magistratura. Afirm¨® que el Consejo posee s¨®lo el papel de "alt¨ªsima administraci¨®n", y que, por tanto, no puede arrogarse prerrogativas que no le concede la Constituci¨®n, como, por ejemplo, debatir la conducta del presidente del Gobierno.

Cossiga reconoci¨® la autonom¨ªa de los jueces, y calific¨® de "sagrada" la decisi¨®n final de un tribunal. Pero dicho esto, neg¨® al Consejo Superior de la Magistratura hasta la posibilidad de revisar su propio reglamento sin antes acudir al veredicto del Parlamento.

Seg¨²n Cossiga, en Italia ha acabado el tiempo de la emergencia creada por el terrorismo, cuando los magistrados, y concretamente el Consejo Superior de la Magistratura, se hab¨ªan visto a veces obligados "a suplir a otros ¨®rganos del Estado". Por eso, ahora deber¨¢n limitarse a la sola funci¨®n administrativa, dejando a los otros ¨®rganos su papel espec¨ªfico.

Por lo que se refiere al derecho de cr¨ªtica a los jueces, Cossiga, dijo que ¨¦ste es parte de la libertad de expresi¨®n sancionada por la Constituci¨®n y que es "un elemento indispensable de la vida democr¨¢tica del pa¨ªs".

Seg¨²n algunos togados, no se puede ignorar que, en estos a?os, el tiempo y la pr¨¢ctica les ha ido ampliando una funci¨®n m¨¢s all¨¢ del simple papel de administradores, y ya no se puede volver atr¨¢s.