La actriz Bette Davis, gran triunfadora de los premios del cine franc¨¦s
Christophe Lambert, el tarz¨¢n de Lord Greistoke, y Sandrine Bonnaire, que para interpretar su personaje en Sin techo ni ley tuvo que pasar dos meses sin lavarse, obtuvieron los c¨¦sares del cine franc¨¦s al mejor actor y a la mejor actriz. La gala de entrega de los premios, considerados como los oscars franceses, se celebr¨® en la noche del s¨¢bado en el Palacio de Congresos de Par¨ªs, con la asistencia de una invitada de honor, Bette Davies, que entre los aplausos de m¨¢s de 3.000 personas puestas en pie recibi¨® un c¨¦sar especial por su carrera cinematogr¨¢fica.
?Crisis? ?Qui¨¦n habla de crisis en el cine franc¨¦s? Al menos desde un punto de vista industrial y gracias a las medidas de protecci¨®n aprobadas por el Gobierno socialista, la industria cinematogr¨¢fica francesa sigue siendo una de las m¨¢s activas del mundo, y esta euforia se advirti¨® en la entrega tradicional de los c¨¦sar, que son los oscars del universo cinematogr¨¢fico galo y que en esta edici¨®n tuvo a la norteamericana Bette Davis como gran triunfadora.En 1985 se produjeron en Francia 151 pel¨ªculas (25 de ellas de directores noveles). La competencia de la televisi¨®n, que cuenta actualmente con seis canales, tres p¨²blicos y tres privados, ha hecho disminuir el n¨²mero de espectadores, pero aun as¨ª el a?o pasa do se contabilizaron 172 millones de entradas, casi 70 millones m¨¢s que en la Rep¨²blica Federal de Alemania.
El principal problema sigue siendo el de la exportaci¨®n. El cine franc¨¦s representa s¨®lo el 1% del mercado norteamericano. El ministro de Cultura, Jack Lang, se ha esforzado en los ¨²ltimos cinco a?os en abrir nuevos caminos, promocionando las coproducciones que ayuden a superar las fronteras, pero los frutos de esta pol¨ªtica son todav¨ªa escasos.
La imagen
En Europa el cine franc¨¦s ha perdido un poco su imagen de cine de autor, explican los responsables del Centro Nacional del Cine, pero por otra parte hemos conseguido mantenerlos muy bien en el mercado interior, gracias a pel¨ªculas que obtienen una gran audiencia nacional.El filme m¨¢s premiado en la gala de los c¨¦sar, Tres hombres y una espuerta, de Coline Serreau, responde a esa l¨ªnea de conquista del mercado externo: se trata de una pel¨ªcula de aventuras que ha tenido una taquilla de seis millones de espectadores.
Los nuevos c¨¦sar demuestran la voluntad de la industria cinematogr¨¢fica francesa de promocionar valores nuevos, j¨®venes directores o int¨¦rpretes que tomen el relevo de los ya consagrados. El jurado de este a?o ha olvidado a candidatos como Gerard Depardieu, que hizo un gran papel en la pel¨ªcula Police, o Isabel Adjani, para fijarse en dos j¨®venes, Lamberd, de 27 a?os, por su interpretaci¨®n en Subway, y Sandrine Bonnaire, de 18 a?os, por su papel en la ¨²ltima pel¨ªcula de Agnes Varda.
Woody Allen con La rosa p¨²rpura de El Cairo gan¨® el premio al cine extranjero.
La promesa
Rizando el rizo, el premio a la "promesa del cine franc¨¦s" fue para una ni?a de 14 a?os y apellido famoso, Charlotte Gainsbourg, hija del cantante Serge Gainsbourg, que asisti¨® a la gala y que se esforz¨® por responder a su imagen, emborrach¨¢ndose a muerte.La ni?a, que recibi¨® el premio con grandes lloros de emoci¨®n, tuvo que ser consolada por la ex compa?era de su padre, Jane Birkin, la ¨²nica serena de toda la familia.
El n¨²mero fuerte de la noche fue la aparici¨®n de la leona, la incre¨ªble Bette Davis, que a sus 78 a?os conserva toda su fuerza e iron¨ªa.
La actriz norteamericana, que se encuentra en Par¨ªs? con ocasi¨®n del 502 aniversario de la cinemateca francesa, recibi¨® el homenaje estusiasta de invitados, jurado y Prensa.
Bette Davis, con guantes largos, pitillo en la comisura de los labios y sus maravillosos ojos azules, record¨® que su madre se llamaba Lefevre de apellido, lo que revela sus or¨ªgenes franceses. En la ceremonia, una colega suya, Olivia de Havilland.
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