La actitud de Fraga

No voy a opinar sobre el s¨ª o el no, pero s¨ª sobre ciertas posturas que considero reminiscencias de la Inquisici¨®n, pues el pr¨®ximo refer¨¦ndum ha sido convertido en una caza de brujas por parte de AP. Est¨¢ claro que la postura del Gobierno ha cambiado. Las presiones econ¨®micas en tiempos de cris¨ªs son dificiles de paliar, especialmente para los d¨¦biles. El presidente ha reconocido y astimido su cambio de opini¨®n. El jefe de la oposici¨®nse rasga lasvestiduras y dice que ¨¦l no cambia como hacen los que gobiernan y he aqu¨ª que por ello decide abstenerse, despu¨¦s de haber sido siempre el abanderado del s¨ª. ?Por qu¨¦? Pues porque a Fraga, ese gran patriota, lo ¨²nico que le interesa es ser presidente del Gobierno. ?l, que es responsable en gran parte de que 10 millones de votos fueran para el PSOE, debe pensar que ¨¦sta es su gran oportunidad. ?Pobre Maquiavelo si se viera representado por ¨¦l! ?Desgraciada Espa?a con esta oposici¨®n y con tantos pol¨ªticos que en vez de representar al pueblo se ocupan s¨®lo de sus ambiciones y basan su poder en la incultura, desinformaci¨®n y pobreza econ¨®mica de sus gentes!Fraga, que dice no tener que cambiar de ideas, parece haber OIvidado, entre otras cosas, que fue ministro de la dictadura y que ahora ejerce de dem¨®crata. ?Qu¨¦ pensar¨ªa votar si tuviera que hacer cola para renovar su carn¨¦ de paro en cualquier oficina de empleo? ?Qu¨¦ pensar¨ªan los dem¨¢s aliancistas de AP?-