Las cartas trucadas de Hussein
(. ..) Las explicaciones y las interpretaciones difieren seg¨²n que uno se encuentre en una u otra capital o seg¨²n de qu¨¦ contactos se disponga. Pero hay un punto en el que la mayor¨ªa de las canciller¨ªas y de los observadores diplom¨¢ticos ¨¢rabes, de todas las tendencias, est¨¢n de acuerdo: se estima que el monarca jordano ha transmitido a la OLP, poco m¨¢s o menos, que "la OLP cuenta con la resoluci¨®n 242 de la ONU, por un lado, y la sal del mar Muerto, por otro, y no hay otra elecci¨®n". En t¨¦rminos m¨¢s claros: o se accede a las exigencias estadounidenses e israel¨ªes, que Hussein apoya, o a la OLP no le queda m¨¢s salida que el suicidio. ( ... )( ... ) El rey Hussein ten¨ªa preparado su golpe. Hab¨ªa comprendido perfectamente, a lo largo de sus entrevistas con Arafat, el l¨ªder de la OLP, y con los dirigentes del comit¨¦ ejecutivo de la organizaci¨®n palestina, que los palestinos no iban a ceder a las condiciones impuestas por Washington y Tel Aviv con respecto a la resoluci¨®n 242 de 12 ONU.
Ni las pretendidas concesiones simb¨®licas de Estados Unidos, ni el escenario de un conflicto entre Simon Peres y George Shultz sobre la cuesti¨®n de la posible participaci¨®n de la OLP en una conferencia internacional -a condici¨®n de que los palestinos reconociesen la resoluci¨®n 242- no eran m¨¢s que cortinas de humo sobre una realidad: la Casa Blanca cre¨ªa, ingenuamente, que con tirar un hueso a los palestinos ¨¦stos se contentar¨ªan. (...)
22 de marzo
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